La historia del trofeo decano del fútbol español (III): Anécdotas, cracks y curiosidades

Evolución del trofeo Teresa Herrera.
Evolución del trofeo Teresa Herrera.

¿Qué tienen en común Wenceslao Fernández Flórez, Pelé y una gaviota? MUNDIARIO da la respuesta en este artículo, el último de este serial sobre la historia del Teresa Herrera.

La historia del trofeo decano del fútbol español (III): Anécdotas, cracks y curiosidades

Desde su fundación, en 1946, se han disputado hasta el momento un total de 68 ediciones ininterrumpidas del trofeo Teresa Herrera, a razón de una por año, toda una vida a lo largo de la cual han tenido lugar un sinfín de anécdotas y curiosidades protagonizadas por los personajes más variopintos.

Por supuesto, los protagonistas absolutos del Teresa Herrera son los futbolistas, con permiso de algún que otro outsider como una gaviota que volvió loco al malogrado colegiado vasco Guruceta durante una final del torneo en los años 70. De Telmo Zarra a Cristiano Ronaldo (que renunció a acudir a la gala de la UEFA para disputar el decano de los torneos de verano) pasando por Beckenbauer, Cruyff, Eusébio, Garrincha, Kubala, Luis Suárez, Zidane o Pelé, los mejores jugadores del momento han competido con mayor o menor fortuna en el trofeo Teresa Herrera.

Esos futbolistas no solo dejaron para el recuerdo jugadas increíbles, pasas de tiralíneas o goles espectaculares, sino que también enseñaron su lado oscuro, con violentas tanganas, como una que hizo palidecer al mismísimo Wenceslao Fernández Flórez, presente en el palco de honor, o agresiones salvajes, como la que ejecutó un desbocado Johan Cruyff sobre un rival tendido en el suelo, al que pateó la cabeza en repetidas ocasiones.

Pero el Teresa Herrera llegó a ser tan grande que el espectáculo no solo estaba en el campo, sino que se extendió a las habitualmente repletas gradas del Estadio Municipal de Riazor, en las que predominaba un ambiente de confraternización entre los presentes representado en lo que se dio en llamar “as merendiñas”, una fiesta lúdico gastronómica en la que peñas y grupos de amigos acudían al recinto deportivo acompañados de gigantescos bocadillos, empanadas del tamaño de una rueda de molino y hasta cajas de marisco, de los que daban cuenta mientras disfrutaban del espectáculo en el terreno de juego.

Bien es cierto que ese espectáculo fue mejor en unas ediciones que en otras (de una especialmente parca en tantos llegó a decir el periodista Manuel Sarmiento Birba que “los goles están más caros que los percebes”), pero en líneas generales todo el mundo volvía a sus casas más que satisfecho y deseoso de que se disputase la próxima edición del torneo.

Con este artículo concluimos la serie que MUNDIARIO ha dedicado al decano de los torneos de verano, pero podrán encontrar mucha más información, datos, anécdotas y curiosidades sobre la competición en el libro electrónico “Auge y caída del trofeo Teresa Herrera: Historia del decano de los torneos de verano”, a la venta el próximo jueves día 12 de diciembre en Amazon, Google Books y www.trofeoteresaherrera.es

 

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