Ferrari sorprende en los test de Jerez mientras el resto de escuderías se esconde

Vettel logra los mejores tiempos en su debut con Ferrai/ferrari.com
Vettel logra los mejores tiempos en su debut con Ferrari. / ferrari.com

Los motores italianos logran los mejores tiempos en las cuatro sesiones, mientras el resto de escuderías no entran a la provocación de los transalpinos y se dedican a rodar cargadas.

Ferrari sorprende en los test de Jerez mientras el resto de escuderías se esconde

Los motores italianos logran los mejores tiempos en las cuatro sesiones, mientras el resto de escuderías no entran a la provocación de los transalpinos y se dedican a rodar cargadas.

Tras 69 días de tenso silencio los monoplazas han vuelto a rugir en el circuito de Jerez, quizás la palabra rugir no sea las más adecuada para esta “ecofórmula 1” en la que el sonido ha sido el gran sacrificado, pero al menos en ese sentido se atisban ciertas mejorías. Y es que una de las primeras conclusiones de estos entrenamientos es que el sonido parece haber formado parte de las mejoras de las unidades de potencia. Así destaca sobremanera el brutal rugido del motor Honda, un fabricante que no ha logrado eliminar las dudas acerca de su rendimiento en estos cuatro días.

Es evidente que en Fórmula 1, donde los secretos son la principal arma, los primeros entrenamientos de la temporada no suelen ser muy esclarecedores. Sin embargo tras lo visto estos días, es evidente que hay algunas escuderías que necesitan trabajar mucho más, otras que van sobradas, y algunas que parecen ir de farol.

Alonso y McLaren

Uno de los momentos más esperados de la temporada era ver el debut de Fernando Alonso subido al nuevo McLaren. Un momento que ha tenido más momentos de amargura que de felicidad, por mucho que el argumento de un motor y monoplaza nuevo sirva como excusa permanente. Así el asturiano sólo podía rodar 6 vueltas a ritmo lento durante el primer día, al igual que su compañero al día siguiente. El las dos sesiones posteriores lograrían, al menos, alcanzar las 30 vueltas, rodando a ritmos bastante lentos. De tan poco rodaje sólo puede destacarse un sonido de motor brutal, en comparación con el resto de equipos, sumado a un comportamiento muy temperamental. Quizás lo más curioso de esta tanda de entrenamientos ha sido la retahíla de excusas expuestas por la escudería inglesa. Así hemos pasado de “problemillas” con los sensores que no se “entendían” entre ellos, el uso de 4 versiones de unidades de potencia (una cada día), hasta el convencimiento de que se trata de un concepto global y revolucionario que necesita tiempo para desarrollarse, como si el resto de las escuderías fabricase bicicletas. Pero quizás el argumento más demoledor lo ha expuesto Button, según el piloto inglés una de las dificultades se centraría en combinar el trabajo de los ingenieros japoneses de Honda con los británicos de McLaren, algo razonable. Lo malo es que el piloto inglés se puso como ejemplo a sí mismo ya que su mujer, Jessica Michibata es japonesa, así según Button “ cuando dicen si, puede no ser lo mismo que tú entiendes por ese gesto”. Querido Jenson, es posible que no pase sólo con las japonesas. En cualquier caso la sensación dejada por Mclaren no es buena, les espera mucho trabajo y esfuerzo en el monoplaza, o nuevos argumentos para las excusas.

Vettel vuela bajo

Había muchas expectativas en el debut de Vettel a los mandos de un Ferrari, el alemán no ha decepcionado mostrándose rápido desde el primer momento. Tampoco ha decepcionado el motor Ferrari, que tanto en la escudería como en Sauber ha logrado los mejores tiempos durante los cuatro días de ensayos. Parece evidente que el motor ha dado un paso adelante, pese a que en el paddock se sospecha de que han rodado con muy poco peso, manteniendo la fiabilidad de antaño. Con 346 vueltas y sin ningún incidente destacable, la Scudería ha podido centrarse en múltiples aspectos del desarrollo sin temer por la fiabilidad.

Mercedes a lo suyo

La escudería alemana ha comenzado el año de la misma forma que terminaron el anterior, por encima del bien y del mal. Tras 516 giros al circuito de Jerez no han encontrado la necesidad de mostrar sus armas al resto. En unos entrenamientos que parecían más centrados en comprobar la resistencia de sus pilotos, el monoplaza se ha mostrado fiable y competitivo pese a algunos leves contratiempos, centrándose sobre todo en tandas largas. Pese a no buscar tiempos rápidos, se han situado con comodidad tras los Ferrari, dejando la sensación de que hay mucho más en el tintero.

Sainz progresa adecuadamente

El joven piloto madrileño debutaba al fin como piloto oficial en Toro Rosso. Una escudería que todavía recuerda con amargura la pretemporada de 2.014 donde no rodaron más de 10 vueltas seguidas. Por fortuna este año todo es diferente, con 356 vueltas, los problemas de fiabilidad han pasado a segundo plano. Gracias a ello Sainz ha podido rodar con continuidad y conseguir unos buenos kilómetros de experiencia en Fórmula 1. Siguiendo el plan de entrenamientos ha logrado completar 136 vueltas sin errores al circuito andaluz en una sola jornada.

Red Bull y el directo

La escudería de la bebida energética se presentaba en Jerez con una pintoresca decoración del monoplaza. Pintado completamente en negro con los patrocinadores silueteados en blanco para, según ellos, hacer más difícil distinguir algunas soluciones de diseño. Sin embargo no ha parecido traerles suerte la nueva decoración, así además de una rotura de motor, graves problemas con el ERS han lastrado sus sesiones. Mención aparte merece el caso de Kwiat, que, en su primera vuelta con el monoplaza, golpeaba el alerón delantero para el que no había recambio disponible. Debido a ello se vería obligado a rodar toda la sesión sin alerón, probando lo que sea que se pueda probar en esas condiciones, hasta la llegada de uno nuevo al día siguiente.

Pocas sorpresas

El año pasado Williams sorprendía a propios y extraños con un rendimiento espectacular desde el primer momento. Este año, conscientes de lo que tienen, parecen haber optado por la estrategia de Mercedes, rodar de forma tranquila probando “cositas”. El caso de Lotus ha sido bastante pintoresco, teniendo que montar el monoplaza en el propio circuito, lo que les costaba perderse el primer día de entrenos. Pese a todo han logrado rodar con relativa normalidad, y pocos sobresaltos, algo inédito desde hace dos años. Quien no gana para sobresaltos es la escudería Force India, ausente en Jerez, y sobre la que penden negros nubarrones. Es posible que tampoco tengan listo el monoplaza para los entrenamientos de Montmeló el próximo 19 de Febrero.

La única sorpresa que ha sobresaltado al paddock es la posibilidad de que Marussia vuelva a competir en 2.015. De ser así lo haría con su antiguo nombre (Manor) y utilizando los monoplazas de 2.014. Y es que la posible presencia de un nuevo inversor frenaría la liquidación de la escudería (tiene la venta de sus activos apalabrada) que saldría del concurso de acreedores. Algunos rumores incluso van más allá al situar a Mclaren como posible inversor para crear un equipo B, desde Woking han catalogado de estupidez dichos rumores.

Tic-tac, tic-tac
Siempre se ha dicho en Fórmula 1 que los entrenamientos sólo sirven para esconderse de los rivales, y que hasta la primera carrera todo es posible. Sin embargo a falta de milagros es evidente que hay escuderías con el trabajo mucho más avanzado que las demás. Quedan 15 días de trabajo en fábrica para los próximos entrenamientos en Montmeló, donde escuderías como Mclaren y Red Bull deberían llevar solucionados la mayoría de sus problemas, para de una vez por todas centrarse en el trabajo de puesta a punto. Es posible que en el circuito catalán, que forma parte del mundial, algunas escuderías busquen el potencial real del monoplaza para compararlo con los resultados del año anterior. En cualquier caso, como se escucha en España últimamente, el reloj corre para todos, tic-tac tic-tac, y algunas escuderías parecen haber empezado con el paso cambiado.

 

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