El dilema de Llorente
El mediocentro no goza de minutos, pero es considerado muy valioso por el club y para el propio Zidane al pensar en el futuro.
Jugar es lo que desea un jugador. Llorente es lo que desea. Tener mayor presencia en el equipo y gozar de minutos. Pero ni lo uno, ni lo otro, es todo lo contrario. Solo 573 minutos en seis meses le tiene pensando en una salida. Su lugar en el campo es el más disputado y para él no hay otra opción que jugar.
Llorente ha pedido por lo menos una cesión para ver minutos, pero Zidane le ha dicho que no a la directiva. El francés prefiere tenerle sentado que añorarlo ante una lesión de los titulares. Llorente tiene por delante a Casemiro, Kovacic, Kroos y hasta el propio Modric en el medio sector blanco.
Kovacic es su gran rival, pues el croata es la primera opción de cambio en la demarcación. El jugador que vino de Italia hace dos años ha rendido y a pesar que se perdió los primeros dos meses de temporada, en su regreso ha recuperado el fútbol y el rendimiento. Por ello, el jugador ha pedido salir, pero su petición ha sido descartada, por lo menos en estos tiempos.
Llorente es proyectado como el mediocentro del futuro en compañía de Casemiro ante la salida de Modric y Kroos por edad. Pero la paciencia no es una de las mejores virtudes para el juvenil español que ya se considera con talento para ser titular o por lo menos para ver mayor cantidad de minutos.
