Croacia, un país de poco más de 4 millones, buscará su primer Mundial

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Luka Modric. / RRSS

Los balcánicos supieron cómo remontar un marcador adverso y en la prórroga de un partido que fue extraordinario desde cualquier punto de vista.

Croacia, un país de poco más de 4 millones, buscará su primer Mundial

Con corazón, con garra y hasta con hambre, la selección de Croacia –un país de poco más de 4 millones de habitantes– está en la final. Ha sufrido. Se veía derrotada, pero las ganas de hacer historia son más fuertes y cuando se trabaja en un núcleo es complicado no conseguir los objetivos. Los balcánicos quiebran cualquier predicción, vencen a los ingleses y se ponen a jugar la final ante Francia el venidero domingo.

Consiguieron la victoria como lo han venido haciendo desde la segunda fase. Con sacrificio y suspense. Con el duelo de hoy han jugado su tercer tiempo extra consecutivo, lo que pone más valor a la gesta conseguida hoy.

El tanto de tiro libre de Harry Kane no amilanó a los croatas, quienes se dieron cuenta que hoy era la única oportunidad de hacer historia, por lo menos para la generación de Luka Modric, que sin duda es el Balón de Oro de este torneo. Otra final podría tardar por los menos 50 años, que se lo digan los ingleses que ahora deberán esperar cuatro años más y tener 56 años sin jugar una final.

Los croatas ponen de manifiesto que esta Copa ha sido la de las sorpresas. Nadie daba por hecho que Francia o los balcánicos llegaran hasta aquí; ellos son los protagonistas de una final que tenía como pretendientes a brasileños, alemanes, españoles y argentinos, pero ninguno está allí. Lo está Croacia, gracias a tener un corazón gigante y un fútbol pletórico.  @mundiario

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