El Real Madrid no acierta en sus últimos fichajes
Entre los últimos nueve refuerzos el equipo blanco ha invertido 395 millones y ninguno ha sido trascendental. Zidane no confía en varios de ellos por lo que hay un divorcio con la directiva.
Inversión sin resultado. En el Real Madrid comienza a notarse un divorcio entre los fichajes y el gusto del entrenador Zinedine Zidane. En los últimos dos mercados la directiva ha invertido 395 millones de euros en la compra de nueve jugadores y solo dos se han establecido en el once titular.
¿Por qué Zidane no confía en su unidad B?, la pregunta toma ahora mayor importancia luego de que sus titulares sumaran nueve partidos consecutivos en 35 días. En ese trayecto se han sumado seis victorias, dos empates y una derrota. El balance que no sería negativo de no ser porque el único revés lo sacó de la supercopa de España y porque tres jugadores (Luka Modric, Rodrygo y Sergio Ramos) han salido lesionados con menor o mayor gravedad en esa seguidilla.
Zidane ha tenido que asfixiar a su plantel regular porque no cree tener un plantel como para rotar, algo que difiere con una directiva que hizo un gran desembolso en jugadores que hasta hoy han sido intranscendentes. Como en todo divorcio queda la duda si la unidad B no ha recibido las oportunidades correctas o simplemente fueron fichajes fallidos.
En 2018 el club blanco trajo a Vinicius (45), Odriozola (30), Mariano (22) y Brahim (17), mientras que en 2019 compró a Hazard (100 millones, más 40 en variables), Jovic (60), Militão (50), Rodrygo (40) y Reinier (30). Ninguno de los nueve se ha consolidado en el once inicial de Zidane e incluso otros han tenido que salir en busca de minutos, como el caso de Jovic que partió a Alemania.
El estratega francés sigue aferrado a una columna vertebral con la cual ganó la primera de las tres champions en 2016, se tratan de: Carvajal, Ramos, Casemiro, Kroos, Modric, Lucas Vázquez y Benzema, siete jugadores cuyos suplentes no llegan a tentar al técnico. La rotación, sin embargo, es inminente. Se vienen partidos seguidos de Copa del Rey, LaLiga y Liga de Campeones y será imposible que la unidad A aguante el intenso ritmo de un esquema en el que la intensidad y la dinámica con y sin balón son determinantes. @mundiario
