Ceferin no descarta sanciones futuras tras el intento de la Superliga

No hay perdón. Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, sigue firme en su intención de sancionar a los clubes que se mantengan con la idea de forma a la Superliga, si bien en la presente edición de la Liga de Campeones no se pudo hacer nada para no alterar el desarrollo de la competición y no incumplir los contratos televisivos, destacó que se evalúan las sanciones a futuro.

Aparentemente la Superliga no ha muerto, puesto que cuatro clubes no han confirmado su salida, tal es el caso del Real Madrid, FC Barcelona, Juventus de Turín y AC Milan, quienes insisten en mantener con vida el proyecto y por ello el presidente del órgano rector del fútbol en Europa, está dispuesto a hacerlos desistir como sea. 

Este viernes  el Comité Ejecutivo de la UEFA  se reunió y tomó la decisión de no expulsar al Real Madrid de la actual edición de la Champions, a pesar que Ceferin había dejado una pequeña puerta abierta cuando se informó de la creación de la Superliga, sin embargo el ejecutivo de la UEFA no tiene poder para tomar esa decisión. 

Sin embargo, Ceferin insistió en que no se descarta una futura sanción administrativa a través de una multa o si será deportiva, pero eso se decidirá a través de un análisis jurídico. 

"Aún estamos esperando una evolución legal de lo que ha sucedido y más adelante la ofreceremos, pero todos se enfrentan a las consecuencias que traerán sus decisiones y lo saben", reiteró el presidente de la UEFA.

Ceferin le envió un mensaje directo a los cuatro clubes que aun no se han bajado de la llamada Superliga. "Si siguen diciendo que son una Superliga, entonces no jugarán la Champions League, por supuesto. Y si están preparados para hacerlo, pueden jugar en su propia competición".

En relación al resto de los equipos que en un principio integraron el proyecto pero se retiraron públicamente, destacó que contra ellos no habrá ningún tipo de sanción. "Para mí, es una situación muy diferente entre los clubes que admitieron su error y dijeron: Dejaremos el proyecto. Los demás saben que yo pienso que este proyecto está muerto, pero probablemente no quieran creerlo", recalcó. 

Para finalizar,  Ceferin recalcó que se siente traicionado. "El sábado fue el peor día, porque me di cuenta de que era una traición, que algunas personas nos mintieron durante años". @mundiario