El Barcelona, y el recuerdo de Romario y Ronaldo

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Romario y Ronaldo. / Instagram

Los dos internacionales brasileros tuvieron pasos efímeros por la entidad blaugrana, pero los fanáticos del Camp Nou guardan buenos recuerdos de estos dos atacantes que marcaron una época.

 

El Barcelona, y el recuerdo de Romario y Ronaldo

El Barcelona en los últimos 25 años ha tenido el tino o la fortuna de haber aglutinado en sus filas algunos de los mejores jugadores del mundo. Se recuerdan casos como dos excelsos balones de oro como Ronaldinho y Rivaldo, sin embargo, dos nombres marcaron su camino en el Camp Nou levantando al respetable con magia y muchos goles que salieron de sus botas.

Los dos genios que MUNDIARIO nombrará a continuación, no vivieron un periplo de muchos años con los blaugranas pero a pesar de eso, su legado futbolístico sigue en el recuerdo de quienes tuvieron la dicha de verlos jugar. 

Romario y Ronaldo, dos fenómenos. Dos jugadores que marcaron época; ambos goleadores letales que henacían uso de sus particulares herramientas para desquiciar a los defensas contrarios y hacer sufrir a los porteros. 

Ambos dieron el salto a la Ciudad Condal desde el PSV Eindhoven de Holanda, los dos se aburrieron de la una liga que apenas les ponía resistencia a sus talentos.

Romario, llegó primero, en 1993; su vida en la capital catalana fue un contínuo idilio con el gol, al igual que su paso por el Vasco da Gama y el club holandés, pero también estuvo casado con con el buen juego combinado de la época gloriosa del Dream Team de Johan Cruyff. Gracias al brasilero, los fanáticos del buen fútbol disfrutaron de un año maravillo, con goles de todas las marcas y colores, que dejaron sin aliento a más de uno.

Se le recuerda especialmente desde la sala de urgencias que tuvo que atender la cadera de Rafael Alkorta, que aún busca el balón y al futbolista carioca, con una cola de vaca en el clásico contra el Real Madrid

Romario marcó entre Liga, Copa del Rey y Champions League 32 goles; fue un año que sin embargo le quedó una asignatura pendiente, después de la derrota que sufriera el Barça ante el Milan de Fabio Capello, con un contundente 4-0 en Atenas. 

Luego, le tocó incorporarse a la selección brasilera para el Mundial de los Estados Unidos de 1994, que terminó con la sequía de los verde amarillo de 24 años sin el preciado título. En aquel entonces, los grandes nombres de la delantera de Carlos Alberto Parreira eran, Romario y Bebeto; en el banquillo estuvo relegado un hombre que tomaría el testigo de O Baixino tanto en el Barcelona como con el Scrach: Ronaldo Nazario

Ronaldo comenzó a hacer de las suyas con el Cruzeiro para luego recalar en Europa con el club de la multinacional Phillips. La liga holandesa se le quedó pequeña y tuvo la oportunidad de aterrizar en el Camp Nou cuando la era de Cruyff había terminado y con Bobby Robson en los banquillos. 

Con el inglés, Ronaldo hizo de las suyas gracias a un sistema súper ofensivo; sus principales cómplices en los terrenos eran Luis Figo, Josep Guardiola, Luis Enrique y GIovanni. Aquel equipo de Robson con José Mourinho de asistente técnico, fue una delicia para los amantes del fútbol de ataque. 

Los goles de Ronaldo le dieron la vuelta al mundo y le permitieron convertirse en El Fenómeno. Aunque no ganó el Balón de Oro en detrimento de Matthias Sammer (Borussia Dortmund), si se pudo llevar a casa el Fifa World Player de 1996

El 9 azulgrana era letal desde todos los frentes y de eso se aprovechó su equipo para ganar la Copa del Rey y la Recopa de Europa. Se quedaron sin La Liga, porque el Real Madrid de Fabio Capello se atravesó en su camino, sin embargo las travesuras del brasilero no dejó indiferente a nadie. 

Se recuerda especialmente su gol contra el Compostela en liga, que demostró la potencia, habilidad y frialdad de un futbolista de época. 

Su relación con el Barcelona, se acabó al igual que la de Romario, un año después. Las circunstancias fueron muy distintas. El primero se fue porque sentía nostalgia de su país, mientras que Ronnie se marchó a Italia porque sus representantes querían ganar mucho más dineros en comisiones 

Así se fue el nueve de la selección brasilera, dejando atrás un montón de recuerdos y 42 goles en todas las competiciones en las que jugó. El Inter de Milán  lo compró y el resto fue historia, incluyendo su paso por el Real Madrid. No obstante, la versión que quedará en la mente de todos fue la de ellos con la camiseta azulgrana, sin lesiones y con un fútbol memorable.

Los dos dejaron huella y la Liga tuvo la oportunidad de ver en el mejor momento de sus respectivas carreras, a dos leyendas vivientes del fútbol. @mundiario 

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