María Nicaragua

Un corazón.
Un corazón.

En abril nació un Ángel en un portal del Mercado Oriental de Managua, parió María Santander una niña  en uno de los tugurios del emporio, nadie se encontraba para verla nacer...

Se contempló María tal y como era. Reconociéndose  en la propia marcha, mirándose indignada en el espejismo de la dictadura en donde nacieron  las níveas palomas  de su rebelión, sintiéndose  azul y blanco, herida y perseguida al rayar el alba. Y con el patriotismo a flor de piel salió del sopor de la protesta, en busca del espectro, del hermano caído que se encuentra ahora en todo el territorio irregular, esperándola para perseguir el ideal bajo el dromedario sol y la elefanta luna.

En abril nació un Ángel en un portal del Mercado Oriental de Managua, parió María Santander una niña  en uno de los tugurios del emporio, nadie se encontraba para verla nacer, nadie se encontraba para oírla llorar, sola se encuentra Nicaragua envuelta en pañales de periódicos amarillentos de dolor, sola se encuentra María en mitad de la noche roja  rogando de hinojos al Corazón del Cielo:

Bermejo amanecer de pájaros y lirios, ruega por nosotros, diáfano río que corre por entre los cerros y montañas, ruega por nosotros, argentino cielo de Nicaragua, ruega por nosotros, gélido viento de los páramos, ruega pos nosotros, fresco amanecer en delicados espejos de aguas que tiritan con las caídas de las hojas de tus robustos hijos, ten piedad de nosotros, luz de libertad, ruega por nosotros , crepúsculo de justicia, ruega por nosotros, mansas palomas negras de la noche, ten en misericordia de nosotros, gleba perfumada de los lagos y volcanes te piedad y misericordia de Nicaragua. @mundiario

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