Exitosa temporada de Manuel Rueda, el novillero revelación de Sevilla
Los aficionados taurinos están teniendo en su punto de mira a Manuel Rueda, el joven sevillano cuyo debut en el mundo del toro está causando un gran revuelo.
Manuel Rueda desde muy joven, comenzó a interesarse por la lidia y tuvo claro su objetivo: ser torero y triunfar. A los 11 años, y acompañado de sus padres, grandes aficionados, pisó por primera vez la Real Maestranza de Sevilla con el motivo ver a un amigo de la familia, el entonces novillero Diego Silveti, de la dinastía Silveti de México. Manuel, quedó prendado aquella tarde del mundo del toro, del coso Sevillano y del valor de los novilleros y tanto insistió a sus padres en dedicarse al toro, que consiguió que le apoyaran para entrar en la escuela taurina de camas, con el Maestro El Almendro.
Mucho ha llovido desde entonces, y el niño fue dejando de serlo, entrenando y tentando. Junto a ello, las ganas de ser torero, también fueron creciendo, y el antiguo matador, Antonio Alfonso Martin, que vio en este chico, algo más que ganas de triunfar, comenzó a” tutelarlo”. Una relación que continua y de la que Manuel no ha parado de aprender Hoy es un joven muy consciente de la dificultad de ésta profesión, sueño de muchos y realidad de pocos, un mundo complicado y lleno de intereses, pero no por eso, se echa atrás en su ilusión de triunfar en los ruedos
El sevillano ha entrado fuerte en el mundo del toro, y sus energías e ilusiones, como no podía ser de otra manera, solo van en esa dirección, triunfar. Dicen los expertos que es voluntarioso, trabajador y entusiasta, que no piensa dejarse vencer por los arquetipos. Rueda, demuestra que su toreo, con empaque, profundidad, pureza y mucha clase, es un novillero que puede llegar a lo más alto.
Manuel Rueda con el capote
Esta temporada había expectación en los aficionados para seguir su evolución , y Manuel, no les ha decepcionado. Muchos han sido los festejos que ha lidiado y ha salido triunfador en todos encuentros. Se ha plantado ante el público como novillero serio, responsable y amante de los toreros antiguos, que han dejado su huella visible, sin lugar a dudas cuando coge el capote o la muleta y se enfrenta a su lote. Su torería, le delata, Está hecho con esa pasta especial que poseen los toreros valientes, y que se crece ante los oponentes complicados, saliendo más que airoso de sus lidias
Antes de pisar el albero maestrante de Sevilla, Manuel venia ya con el triunfo de en Paterna del Campo, donde cortó dos orejas y rabo, a su oponente. En Sevilla, dejó gustó sus buenas maneras sevillanas, pero le falló la espada, y perdió triunfo. El público le ovacionó y tuvo que dar la vuelta al ruedo. Sin embargo, confesó a los suyos que le quedaría un sabor agridulce de aquella cita, tan importante en su carrera.
Después, ha ido enlazando triunfos, un verano de éxitos en todas las plazas donde ha lidiado: ,Vélez Rubio (Almería), Dos Torres (Córdoba), Perales de Tajuña (Madrid), Turegano (Segovia), Pedro Bernardo (Ávila), -Los Navalmorales (Toledo), Portillo de Toledo (Toledo)… Un periplo donde se constata que ha mejorado notablemente la suerte de matar, deslumbrando por sus estocadas impresionantes, y faenas dignas de una gran figura
Seguiremos la carrera de este joven novillero, en el que Sevilla tiene puesto sus ojos, y estamos seguros que Manuel,Rueda no sólo no va a defraudar, sino que le esperan páginas gloriosas en en la difícil carrera del toreo.@mundiario