Divagaciones

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Divagaciones

Afuera corría un gélido viento navideño y se le congeló el video-alma del espejo, pero se sintió emancipado con sus filmaciones perdidas y de repente en una vasca seca y amarilla, miró venir a la muerte blanca en pelotas a traerlo, "daemon", gritó, y sobreponiéndose tomó conciencia cierta... / Cuento.

Hoy es un buen día para morir- se dijo y agregó- brilla el sol en el oriente y el tráfago de la modernidad me proyecta en el pensamiento imágenes retrospectivas, mientras que el flujo y el reflujo del largometraje de las generaciones que paso fotografiando con el lente de mi conciencia se me convierten en un films de hormigas enajenadas que se van grabando en todo mi rollo hasta ponerme la carne como de ciencia-ficción, en este argentino amanecer del séptimo arte, -terminó reflexionando-. Se sintió bien y fue feliz por un momento en el bus de las filmaciones, en donde viajaba de incógnito y que poco a poco se iba llenando de gente que se dirigía a su trabajo, él iba muy contento filmando todo este abigarrado panorama y la dulce sonrisa de una linda Cindirella negra le hizo sentir satisfecho con su improvisado spot  comercial. A su lado se encontraba un hombre fotogénico, que cabizbajo y harapiento va sumergido en su miseria, y de pronto lo interpeló diciéndole — No jodás el desempleo man, es terrible, es como una película de terror, no jodás, te devora, te enajena ¿vos sabés? Por eso me ves así como el protagonista de crimen castigo ¿me entendés?

—Fíjate -le continuó diciendo- Yo tenía mi casa, mis cosas, mi profesión y todo, y ahora yo y mi familia vivimos en la calle, y de la calle no jodás, ¿vos sabés?, - él lo quedó viendo fijamente a sus familiares ojos con sus focos de aumento, le hizo un close up, y en un santiamén descubrió al típico personaje genial y deplorable que había sido víctima de la fatalidad de esta película. E ineluctablemente pudo filmar a Dios en aquella diáfana mirada que le sonrió por no saber actuar.

De inmediato una gran cuita invadió todo su ser y muy consternado pensó,¨ El sigiloso fantasma del desempleo sobrevuela de nuevo en el globalizado arte de la existencia, y como una plaga de Egipto o un efecto especial de Warner Bross va carcomiendo los hogares de millones de actores de este video type. No jodás ¿vos sabés?

 ¡Sálvanos señor que nos hundimos con todo y cámara!¨—Terminó gritando en sus adentros no fregués, sin encontrar respuesta alguna a su resaca de inicio de año.

Al pasar filmando por la Rotonda Rubén Darío se dispuso a bajar del desvencijado gusano de metal, no sin antes dejarle a dios un puñado de monedas de oro por su trágica actuación y también para ayudarle a paliar un poco su mal pagada vida de Creador artístico. Él, muy agradecido le dijo ¨gracias brother por acordarte de mí.¨ Al instante comenzó abrirse paso entre el tumulto de actores y actrices que iban de pie y pegados como sardinas enlatadas entre luces y cámaras ¿Vos sabés?, hasta que al fin, en la parada del Colegio Teresiano, logró bajarse pegado como sanguijuela al culo de una sirena que le miró desdeñosamente, no jodás ¿vos sabés lo qué es eso?

Afuera corría un gélido viento navideño y se le congeló el video-alma del espejo, pero se sintió emancipado con sus filmaciones perdidas y de repente en una vasca seca y amarilla, miró venir a la muerte blanca en pelotas a traerlo, "daemon", gritó, y sobreponiéndose tomó conciencia cierta y plena de que El Raskolnikov, que viajaba sentado en la oruga colectiva de esa mañana junto al enajenado escritor de la prensa literaria de este sketch, era él mismo no jodás, ¿vos sabés?

Con la muerte blanca a sus espaldas se alejó vomitando por toda la avenida hasta llegar al parque de la colonia Centro América, en donde se dijo mientras tomaba agua de un grifo ¨Suponiendo que la verdad es una mujer desnuda de ojos azules como la pintura de Modigliani que camina un domingo a las cinco en punto de la mañana sobre Biscayne Boulevard a la vista de toda la bètise bourgeoise (estupidez burguesa)  y en medio de la barahúnda de vehículos que hacen sonar sus claxon al verla pasar, yo me sentiría totalmente libre de pensar que en esta realidad estamos todos salvados, porque una mujer así es como un jardín de rosas que transmite su fragancia y belleza al despertar de la aurora sin miedo a expresar la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad no jodás ¿vos sabes lo que es eso?-recapacitó añadiendo- Pero suponiendo que la verdad sea un niño montado en bicicleta que en Flagler y la 63st es elevado a los cielos por un camión cargado de estiércol cuando se disponía a cruzar la avenida, entonces saben qué- se dijo- esa realidad es una mierda que a diario la leemos en el Miami Herald o en cualquier periódico del mundo y que no necesita  siguiera ser contada para que todos aquí sepamos de que ese olor a merde es real.

Pero si la puta verdad es un obrero que se dirige al trabajo a limpiar los cristales del Centrust Bank en el Down Town de Miami y que montado en el andamio desde un décimo piso en un repentino vértigo de felicidad que nunca había sentido desde que llegó a la Florida de Ponce de León  hace más de veinte años, y se cae estrepitosamente sobre el duro concreto de la calle, y  queda vivo todavía de puro milagro ante el asombro del Sistema, entonces está realidad es inverosímil o una quimera hecha a la medida de los que ostentan el poder económico y que se pasean en trajes de baño y smoking por las grandes  urbes, metrópolis y muladares del planeta buscando el stablischment de su gran capital, para todos los que caen del tercer cielo y que se levantan sin ánimos de luchar por la liberté, la egalité y la fraternité que tanta falta les hizo cuando cruzaron el rio bravo de la frontera o por el desierto de Tijuana para venir a la pesadilla americana, entonces yo diría –se interpeló ahora-  que esa verdad no existe en esta realidad en donde los que caen de arriba y los que se encuentran abajo estamos realmente jodidos en un Estado de Derecho que contiene tanto mareo Constitucional que me dan hasta ganas de vomitar no jodas ¿vos sabes?.

Pero en todo caso si la tal verdad es el l´art pour l´art ergo todo esto es una gran mentira que un Titiritero llamado Dios nos hizo creer desde su Monumental Laboratorio del Destino y la Fatalidad, en donde la realidad al fin y al cabo somos tú y yo flotando a la deriva hasta llegar a Key West con quemaduras de tercer grado y muertos de sed  y esta vivencia que cualquiera se puede tomar  la liberta de escribir en la universidad  de la vida  y que con el tiempo dejara de existir. Mientras ellos, las generaciones  que van y vienen en el flujo y reflujo generacional de esta realidad se continuaran  debatiendo  entre el más allá de la vida y la muerte o entre el más allá del más allá, en donde el bien y el mal es un acuerdo simbiótico y filosófico que nunca llega al buró del ente cuerdo y regulador de la existencia de todos los que estamos aquí , de los que vendrán, y de los que ya se fueron en todo este duro relajo sin fin , que es de todos y que al final de un tiempo dos tiempos y mitad de uno  no es de nadie no jodás ¿vos sabes lo que es eso?- pensó, sintiéndose más aliviado y agregó-.

Pero en todo caso, si la verdad por último, fuera esta realidad tangible e intangible del movimiento de las ideas y de los sueños en la que todos nos movemos ahora, entonces a decir verdad, el Raskolnikov del bus en donde realice mi video espejo, la Mujer Desnuda de Ojos Azules de Modigliani, El Niño Huérfano que pedalea en bicicleta por Flagler Street, El Superman que se cae del edificio del Centrust Bank y todo lo demás es un Remanente Arcaico o una Apariencia como la que estoy viviendo yo ahora desde que llegué deportado a este país de lagos y volcanes no jodás ¿vos sabés? – terminó discurriendo Jorge bañado en sudor en pleno plenilunio de medianoche, al llegar por fin a la casa de sus padres, con los labios resecos y reventados de tanto divagar, no jodás ¿vos sabés lo que significa todo esto? @mundiario

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