Del cómic al pezón, así han evolucionado los carteles del cine de Almodóvar

Madres paralelas
Madres paralelas
"Te quiero porque eres sucia..." cantaba Alaska en Pepu, Luci, Bom y otras chicas del montón (1980), primer largometraje de Almodóvar. La evolución de su cine se ha plasmado también en la cartelería.
Del cómic al pezón, así han evolucionado los carteles del cine de Almodóvar
Madres paralelas, la nueva película de Pedro Almodóvar, se estrena esta semana en cines. Se trata de su largometraje número 22 desde que se inició en los largos en 1980 con Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón y en la que podemos ver a una jovencísima Alaska de 15 años interpretando a Bom y con peineta azul cantando:

Te quiero porque eres sucia,
guarra, puta y lisonjera,
la más obscena de Murcia
y a mi disposición entera.
Sólo pienso en ti, MURCIANA!!!
porque eres una marrana.
uuuhhh...
Te meto el dedo en la raja,
te arreo un par de sopapos,
te obligo a hacerme una paja.
Soy más violenta que el GRAPO.
Sólo pienso en ti, MURCIANA!!!

Eran los 80’, donde la impertinente corrección política era ciencia ficción.

Pepi Luci Boom y otras chicas del montón.

Este primer cartel en la carrera como director de Pedro Almodóvar y que asemeja a un cómic corrió a cargo de Carlos Sánchez Pérez, artísticamente conocido como Ceesepe y fallecido en 2018 a los 60 años de edad a causa de un cáncer. Pero antes, recibió en 2011 la Medalla de Oro al mérito en las Bellas Artes.

El primer gran éxito de recaudación del director español llegó con su quinta película, Matador (1986), por la que Antonio Banderas recibió una nominación como Mejor actor de reparto en la primera edición de los Premios Goya que se celebraba, premio que finalmente se llevó Miguel Rellán por Tata mía.

Matador.

El cartel de este melodrama asesino que ya muestra los colores rojo y amarillo que pasarían a ser utilizados posteriormente en casi todos sus carteles, es obra del argentino Juan Gatti, quien, por otro lado, ha colaborado con Almodóvar en otras muchas de sus películas creando esa iconografía colorida tan reconocible en el director.

A partir de esta película, todas fueron éxitos, mayores o menores, pero la expectación ante lo nuevo de Almodóvar se convirtió en una constante a lo largo de los años. Mujeres al borde de un ataque de nervios (1988), en donde volvió a contar con Antonio Banderas y Carmen Maura - ella, por aquel entonces, musa de Almodóvar hasta que rompieron relaciones casi en la mismísima alfombra roja de Hollywood Boulevar en aquella entrega de los Oscar - , rompió el molde y catapultó al director manchego a Hollywood, pero también al panorama cinematográfico internacional: el Festival de Toronto le otorgo el Premio del Público a Mejor Película; Carmen Maura fue galardonada como Mejor actriz en los Premios del Cine Europeo; Mejor guión en el Festival de Venecia o nominada a Mejor película de habla no inglesa en los Globos de Oro y los Oscar. No se llevó, en esta ocasión, la ansiada estatuilla que fue a parar a la película sueco-danesa, Pelle el conquistador, dirigida por Bille August. El Oscar no le valió al danés fama mundial, ni su trabajo posterior tampoco. Almodóvar, sin embargo, supo seguir explorando con maestría su talento cinematográfico… sin Carmen Maura.

Mujeres al borde de un ataque de nervios.

Salta a la vista que el cartel de Mujeres al borde de un ataque de nervios lleva la firma de Juan Gatti.

Tras ¡Átame!, Tacones Lejanos, Kika o La flor de mi secreto, llegó otro éxito sin precedentes en su filmografía: Todo sobre mi madre (1999) y el primer y ansiado Oscar para Almodóvar a la Mejor película extranjera, además de Mejor película extranjera en los Globos de Oro, mejor director en el Festival de Cannes, 7 premios Goya incluyendo mejor película y director, etc. etc. La crítica especializada entonó un unánime ¡bravo! y ¡olé!, y el público acudimos en masa al cine (es la segunda película de Almodóvar que más ha recaudado: más de 67 millones de euros en todo el mundo con un presupuesto de 4 millones. Volver (2006), con la fama ya mundial de Penélope Cruz, es la primera).

Todo sobre mi madre.

El diseñador e ilustrador español Oscar Mariné, director de la icónica revista Madrid Me Mata durante los años 80 de la Movida madrileña, creó el inolvidable cartel de esta película. De nuevo los colores marca España, el rojo y el amarillo, llamando la atención de nuestras miradas.

Y entonces comenzaron los carteles con los rostros femeninos de sus actrices en primera plana: Hable con ella (2002), Volver (2006) y Los abrazos rotos (2009), los tres, carteles de Juan Gatti, son muestra de este cambio de tendencia en el que lo kitsch pasa a un segundo plano

Carteles Hable con ella, Volver y Los abrazos rotos.

Su obra más personal, Dolor y Gloria (2019), un collage de los momentos más relevantes de su vida, se presenta en cartel también así, como un montaje de imágenes con aroma mediterráneo que compone, nuevamente Juan Gatti.

Dolor y gloria

Y llegamos al primero de los dos carteles de la última película de Almodóvar, Madres paralelas. Diseñado por Javier Jaén y que muestra un pezón del que sale una gota de leche. Algo natural con la vida misma no fue visto así por la “inteligencia” (nótense las comillas) artificial de las redes sociales que censuró el cartel y las publicaciones que lo enseñaban.

Madres paralelas.

Ante la polémica surgida, no por el cartel, sino por la censura del mismo, los que mandan en Facebook e Instagram rectificaron y permitieron que el cartel circulase libremente. “Habéis conseguido que las mentes que hay detrás del algoritmo que decide qué es o no es obsceno y ofensivo hayan dado marcha atrás y permitan que el cartel circule libremente”, declaraba el propio director en un comunicado.

El propio diseñador Javier Jaén también firma el, ahora, cartel oficial de la película que desde este viernes acapara las carteleras de los cines. @opinionadas en @mundiario

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