Los nuevos albergues, sucesores de los antiguos hospitales del Camino de Santiago
En el siglo XIX, las peregrinaciones a Santiago, que habían languidecido tras la reforma luterana y las pestes europeas, y que prácticamente desaparecieron tras la ocultación de los restos del Apóstol, hicieron que desaparecieran también, por innecesarios, muchos de los hospitales del Camino. Y ya en el siglo XX, al renacer las peregrinaciones, especialmente en el Camino Francés, van apareciendo una red de albergues de mano de la autoridad civil y en los que apenas tienen participación las organizaciones religiosas. Una red de albergues que en principio se establecieron en el Camino más conocido, más difundido, el Camino Francés, y que se van extendieron a las demás rutas históricas. Estos nuevos albergues han sucedido a los antiguos hospitales del Camino.
Al analizar el Camino de Santiago, los hospitales situados en los puertos de montaña destacan por ser puerta de entrada de los Caminos de Europa a la Península, Santa María de Roncesvalles, ya citado, y Santa Cristina de Sonport, al que el Rey de Aragón Pedro I hizo una donación en el año 1100.
En el interior destaca el Hospital de Santa María del Cebreiro. Ya en Galicia, tras la subida al Cebreiro, construyeron los benedictinos un santuario hospital, que los Reyes Católicos con ocasión de su viaje a Santiago en 1486, ordenaron que se arreglase y dotase, vinculándolo a San Benito de Valladolid. En dicho santuario sitúa la leyenda un hecho milagroso que le ha dado especial renombre.
En el Camino Primitivo que siguió Alfono II El Casto y los peregrinos del Siglo IX, cabe mencionar los hospitales del Puerto de la Espina y el de Fonfria. Este último, fundado a instancia de los Reyes Católicos en la sierra del Acebo, entre Galicia y Asturias, en un puerto de sierra despoblada donde dizen que acaescía que los romeros que yban a Santiago e los otros caminantes que pasaban por el dicho Camino, recibían mucho detrimento a cabsa de non aver ventas ni población en dio puerto. También en el mismo Camino, existía el hospital del Montouto, del que hoy, se conservan ruinas y documentación.
En la Ruta de la Costa Cantábrica existen también abundantes referencias a hospitales, entre los que se conoce el fundado en Arrante, por un Canónigo de la Catedral de Mondoñedo ya en el siglo XVI.
A lo largo del Camino Francés, abundaron los hospitales de todo tipo en los distintos lugares por los que pasaba; siendo de destacar el Hospital del Rey, a las afueras de Burgos, administrado por el Monasterio de las Huelgas por decisión real. Existían también Hospitales en Fromista, Carrión y León.
En la Vía de la Plata, los freires de Santiago, los monasterios, conventos y poblaciones por las que pasaba, facilitaban a los peregrinos su caminar; y en el Camino Inglés, destaca el Hospital de Bruma, en el que pernoctó Carlos I cuando iba de viaje de Santiago a Coruña, con ocasión de celebrar Cortes en ambas ciudades.
En el Camino Portugués de la Costa, que penetraba en España por Tui, pasaba por Padrón, punto esencial de la tradición jacobea, llevó al arzobispo don Rodrigo de Luna a establecer aquí un hospital en el año 1458.
En el Camino de Fisterra y dependiendo de la Iglesia de Santiago, existió el hospital de Logoso, arrasado durante la invasión napoleónica. @mundiario