Compostela para los peregrinos llegados por el Camino de Santiago (17)
Detrás del Pórtico de la Gloria, arrodillado, está el maestro Mateo, conocido en Galicia como “o santo dos croques” –chichones–. Los padres llevan a sus hijos para que choquen la cabeza con Mateo.
Una de las joyas de la Catedral de Santiago es el Pórtico de la Gloria. En el arco de la izquierda las estatuas de apoyo según López Ferreiro son: Joel, Abdías, Oseas y Amós. En la base del pórtico se representan cinco grupos de animales con diversas interpretaciones. En las jambas de las puertas de la calle, de izquierda a derecha, están las imágenes de San Marcos, San Lucas, San Juan Bautista, la reina Esther, Judit y Job.
Detrás del parteluz hay una figura arrodillada que representa al maestro Mateo, con bucles en la cabeza, como avergonzado de lo que ha hecho, mirando al Altar Mayor y de espaldas al Pórtico.
En Santiago se le conoce popularmente como "O Santo dos croques", el santo de los chichones donde tradicionalmente los padres gallegos llevan a sus hijos y se les ayuda a chocar su cabeza con la del maestro Mateo para que de esta forma le transmita su imaginación e inteligencia, ser buenos estudiantes, abrir y ensanchar la mente.
Es una estatua esculpida muy en bruto, como dejada así por su poca importancia, con expresión juvenil, aspecto de angelote, muy querida por el pueblo, en la cartela que lleva originariamente se leía "Arquitectus".
Después de entender todo lo que el maestro ha pretendido representar produce admiración contemplar todas y cada una de las imágenes una al lado de la otra, mirándose, en diálogo, con expresión real en la cara una belleza celestial, románico avanzado con rasgos suaves, en origen estaban policromadas en colores y oro, se retocaron en 1651 estropeándose la policromía al hacer una copia en yeso en 1806 para el museo "Victoria and Albert Museum" de Londres. Actualmente se están nuevamente restaurar su policromía original.
Entre los arcos y la fachada hay tres bóvedas de nervaduras decoradas con flores y frutas, a la derecha en el suelo tres lápidas: en bronce la del gran cardenal gallego Fernando Quiroga Palacios, arzobispo de 1949 a 1976. Fue Presidente de la Conferencia Episcopal de España desde 1966 a 1969. Las otras son del arzobispo Tomás Muñiz de Pablos muerto en 1948 y la del arzobispo Pedro Muñiz, murió en 1224 acusado de nigromántico.
Anécdota:
Se dice en la comarca que los ingleses habían prometido traer el mar hasta Santiago si se les daba el original. Al atardecer parecen iluminarse, brillan las caras del Creador, de Santiago, San Juan, las barbas de Jeremías, Esther ruborizada, la sonrisa pícara de Daniel. @mundiario
Rosalía de Castro expresaba así esta imagen en "Follas Novas"
O sol poniente, polas vidreiras
da soledade, lanza serenos
raios que firen descoloridos
da gloria os ánxeles i o padre eterno.
Santos i apóstoles, ¡védeos!, parece
que os labios moven, que falan quedo
os uns cos outros; i aló na altura
do ceo a música vai dar comenzo
pois os groriosos concertadores
tempran risoños os instrumentos.
¿Estarán vivos?, ¿Serán de pedra
aqués sembrantes tan verdadeiros,
aquelas túnicas maravillosas,
aqueles ollos de vida cheos?
.......................................
(Traducción)
El sol poniente, por las ventanas
de la soledad, lanza serenos
rayos que hieren descoloridos
los ángeles de la Gloria y el Padre Eterno.
Santos y Apóstoles ¡miradlos! parece
que los labios mueven, que hablan bajo
unos con otros, y allí en lo alto
del cielo, la música va a empezar
pues los gloriosos concertistas
afinan risueños los instrumentos.
¿Estarán vivos? ¿Serán de piedra
aquellos semblantes tan verdaderos,
aquellas túnicas maravillosas,
aquellos ojos de vida llenos?
(Continuará)