La violencia de Nicaragua se extiende a los pueblos indígenas y afrodescendientes

Manifestantes en Nicaragua. / Mundiario
Manifestantes en Nicaragua. / Mundiario

Uno de los organismos especializados de la ONU pidió al Gobierno de Nicaragua garantizar los derechos de estos grupos discriminados.

La violencia de Nicaragua se extiende a los pueblos indígenas y afrodescendientes

Los derechos humanos son una ilusión en Nicaragua. De hecho, el Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial (CERD) expresó su alarma ante los presuntos actos de violencia cometidos contra los pueblos indígenas y afrodescendientes  en Nicaragua.

Y es que, después de una evaluación sobre el país centroamericano, el Comité determinó que la nación “no parece contar con una legislación nacional que prohíba la discriminación racial” en los términos de la Convención Internacional para la Eliminación de todas las formas de Discriminación Racial ni con disposiciones sobre el tema en el Código Penal. Por el contrario, los pueblos padecen discriminación estructural como lo reflejan los índices de pobreza y la precariedad, exclusión y violencia que enfrentan constantemente.  

Ante esta situación, el “Comité reitera su preocupación sobre la falta de protección explícita y reconocimiento legal de los pueblos indígenas del Pacífico, Centro y Norte”. Sin embargo, proponen a Nicaragua a adoptar medidas especiales o de acción afirmativa para eliminar la discriminación estructural que afecta a esas poblaciones.

Grupos marginados

De igual forma, el Comité de la ONU exhortó al país a garantizar la protección de los derechos de los pueblos originarios a poseer, utilizar, desarrollar y controlar con plena seguridad sus tierras y recursos. Además, señaló que la protección de los derechos humanos y la eliminación de la discriminación racial son esenciales para el desarrollo económico sostenible.

En cuanto al uso excesivo de la fuerza contra los grupos marginados, el Comité recomendó la adopción de provisiones que garanticen el respeto del principio de proporcionalidad y de estricta necesidad en el uso de la fuerza, capacitando a los agentes del orden en la utilización de mecanismos convencionales y en combate a la discriminación racial.

Detenciones arbitrarias

El acceso a la justicia es inexistente para los indígenas y afrodescendientes, pues sufren prácticas discriminatorias persistentes y violaciones a las garantías del debido proceso y a una defensa adecuada. Incluso, padecen “de perfilamiento racial de la población afrodescendiente de la Costa Caribe en el marco de la lucha contra narcotráfico resultando en falsas acusaciones, detenciones arbitrarias y allanamientos sin orden judicial”.

Asimismo, el Comité pidió al Estado que, en el marco de la lucha contra el narcotráfico, los entes policiales no lleven a cabo acciones en contra de personas afrodescendientes basados en la estigmatización y perfilamiento racial. @mundiario

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