Trump planea una estrategia que limitaría el poder de Biden para regular a los bancos
Aunque ya está prácticamente perdida la batalla legal que tiene lugar en la mayor potencia mundial, pero solo con un factor de poder que busca evitar el ascenso del nuevo presidente electo, la agenda del líder saliente parece enfocarse en generar ingobernabilidad a su sucesor, sobre todo, el talón de Aquiles de esa poderosa nación; la economía.
Y es que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este miércoles que tiene la intención de nominar al contralor de la Moneda interino para un nuevo período de cinco años, lo que podría complicar cualquier plan de la futura Administración Biden para imponer regulaciones más estrictas a los bancos de Wall Street, según reseñó hoy la agencia Bloomberg.
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Esta decisión implica que el mandatario saliente prevé designar a su más alto funcionario de confianza en la gestión administrativa del organismo que regula a nada más y nada menos que las grandes corporaciones financieras del mercado más grande del mundo, Wall Street, que es el epicentro del sistema capitalista global.
En un comunicado emitido este pasado martes, la Casa Blanca dijo que planea “presentar a Brian Brooks al Senado (todavía controlado por los republicanos) para su confirmación”.
La estrategia de Trump es forzar a Biden a trabajar con un regulador más liberal hacia los bancos, aunque el presidente electo es partidario de establecer más controles sobre el sistema financiero norteamericano para evitar las fugas de capitales que beneficien a los más ricos y dejen sin liquidez a las empresas y al Gobierno para ayudar a los segmentos más necesitados de la población. Sin embargo, Biden podría contraatacar y anular esta jugada de Trump, pues la ley dice que “un contralor puede ser destituido por el presidente por razones que él mismo comunicará al Senado”, un poder que no ha sido probado ni usado hasta ahora en toda la historia de EE UU, pero en este año tan excepcional, todo es posible en la primera potencia mundial.
La mayoría de las principales regulaciones para los bancos estadounidenses se redactan y aprueban en colaboración entre la Reserva Federal, la Corporación Federal de Seguros de Depósitos y la OCC. Un eventual bloqueo de Trump a los controles que trate de imponer Biden si el presidente republicano logra confirmar en el cargo a Brooks, podría tener impacto en la rentabilidad y la seguridad de las inversiones de los bancos, lo que tendría un efecto inmediato sobre las empresas y sobre el empleo en todo el conjunto de su oferta global dentro del mercado laboral estadounidense, gravemente golpeado por la recesión derivada de la pandemia de covid-19.
Con funcionarios de corte liberal en el ámbito financiero, alineados con la visión de Trump, podría también darse una serie de impasses entre los funcionarios de Biden y esas personas dejadas por el presidente saliente en los puestos más comprometedores, de mayor responsabilidad y con más influencia en la administración de la compleja economía estadounidense, que se sustenta en un 90% de la actividad bancaria-financiera como motor del sistema capitalista mundial.
La agencia Bloomberg detalló en su reporte, con fuentes ligadas a la Casa Blanca, que Brooks “no tiene mucho tiempo para ser confirmado antes de que Biden preste juramento el 20 de enero”. El contralor tendría que tener una audiencia ante el Comité Bancario del Senado, seguida de una votación del panel y luego una votación del pleno del Senado. Si pasa esos tres filtros sin ninguna objeción por parte de algún sector republicano que esté descontento con la gestión de Trump, entonces Biden tendrá a un alto funcionario capitalista y trumpista en el inicio de su Administración, que parece estar siendo saboteada de antemano por el mandatario actual tras perder también en el terreno judicial.
Brooks, quien se convirtió en director interino de la OCC en mayo, ha aprovechado la experiencia que obtuvo en Coinbase, con sede en San Francisco (California), y otras firmas para impulsar una agenda de tecnología financiera. También fue abogado principal y miembro de la junta de Fannie Mae, según Bloomberg.
Trump no se la pondrá fácil a Biden en la gestión de una economía sobre la cual el republicano se jacta de haberla convertido en la más próspera, pujante y grande de la historia mundial. @mundiario
