El narcotraficante colombiano alias “Otoniel” se declara culpable de todos los cargos
El narcotraficante colombiano Dairo Antonio Úsuga, alias “Otoniel”, se ha declarado culpable de todos los cargos que le imputó una corte federal del estado de Nueva York en una nueva audiencia este miércoles. Quien fuera uno de los capos más buscados en las últimas dos décadas ha admitido culpabilidad al frente del Clan del Golfo, por lo que deberá pagar cumplir una sentencia de un mínimo de 20 años en prisión.
El otrora capo más buscado de Colombia ha leído su declaración de culpabilidad ante la jueza del Tribunal Federal del Distrito Este de Nueva York, una corte que aglutinó las tres grandes causas contra el narcotraficante, que al final ha accedido a colaborar con la justicia a través de un acuerdo, en el que también ha aceptado a pagar 216 millones de dólares bajo concepto de incautación.
La justicia estadounidense acusa a Otoniel de liderar una organización criminal de forma continuada, conspiración marítima para la introducción de narcóticos en EE UU entre 2002 y 2021, así como asociación delictiva para importar narcóticos hasta ese país entre 2001 y 2009, como cabecilla del también denominado Clan Úsuga.
“Toneladas de cocaína se movieron con mi permiso y mis órdenes de Colombia a Panamá, Costa Rica, Honduras y México”, ha aseverado el detenido a la jueza, en medio de una lectura en la que admitió su culpabilidad en el tráfico de drogas desde América del Sur hasta suelo estadounidense de la mano de una estructura criminal organizada, que también hace parte del conflicto armado colombiano.
Otoniel admitió que se traficaron 96 toneladas de cocaína
Otoniel, que compareció con el uniforme azul grisáceo de la cárcel y el pelo corto, ha reconocido en su declaración de culpabilidad sus vinculaciones y actividades dentro de los grupos paramilitares colombianos, y la seguridad que les brindaba a los narcotrafinates.
Úsuga también admitió que bajo su conocimiento se movieron 96.856 kilogramos de cocaína desde las selvas de Colombia hasta suelo norteamericano, la cantidad de droga que traficó el Clan del Golfo entre 2008 y 2021, que según la declaración de culpabilidad tenían oficinas para la recaudación de las ganancias del narcotráfico. De hecho, según CNN también cobraban “impuestos” a los narcotraficantes por tener laboratorios de drogas en zonas controladas por las Autodefensas Gaitanistas de Colombia.
Antes de declararse culpable, la jueza le preguntó si era plenamente consciente de lo que hacía, le informó de que al aceptar su culpabilidad estaba renunciando a su derecho de ser procesado en un juicio con un jurado. Sin embargo, Otoniel ya había manifestado a mediados de este mes su propósito de aceptar los cargos y llegar a un acuerdo con la Fiscalía.
Úsuga explicó que en 1997 se incorporó a las filas de las Autodefensas campesinas del departamento de Córdoba y la subregión colombiana del Urabá, que describió como un grupo paramilitar de extrema derecha nacida para combatir a las tropas de las guerrillas marxistas durante el conflicto armado de Colombia. También relató que, junto a otros miembros, comenzó a ofrecer seguridad a los narcotraficantes que atravesaban las zonas que controlaban.
La jueza le preguntó además acerca de su estado de salud, a lo que Otoniel contestó que padece de afecciones por las que recibe medicación que nunca especificó. Ahora con la posibilidad de un juicio descartada, el narcotraficante deberá esperar a que la magistrada dicte su sentencia, que no podrá ser menor a los 20 años de prisión que estipula la ley como franja menor. De hecho, Úsaga podría ser condenado a cadena perpetua, sin embargo, no podrá ser ingresado a prisión de por vida debido al tratado de extradición entre EE UU y Colombia, pues en el país andino no existe esa pena. @mundiario
