Joe Biden pondría en marcha estas medidas en sus primeros 100 días en la Casa Blanca

Joe Biden está cada vez más cerca de convertirse en el nuevo presidente de los Estados Unidos. El demócrata tiene 264 votos electorales contra los 214 del mandatario republicano Donald Trump. Si las proyecciones se cumplen y no hay ninguna sorpresa como hace cuatro años, las seis adhesiones que le faltan vendrían del estado de Nevada donde el panorama pinta favorable para Biden porque tienen una amplia ventaja. 

Con la victoria probable del demócrata, lo que sigue es conocer cuáles serán sus primeras medidas en, por los menos, cien días de gestión en la Casa Blanca. De momento, Biden tiene la mirada puesta en grandes temas que han afectado a los Estados Unidos en los últimos meses : el coronavirus, la economía, la salud, la educación, la inmigración, la seguridad, la justicia, la cooperación internacional y la política exterior. 

El demócrata desea evitar que la pandemia del coronavirus siga disparándose en el país. Al cierre de la jornada, las autoridades sanitarias reportaron 100 mil nuevos casos por la enfermedad y engrosa la proyección de 10 millones de infectados. Por eso, como parte de su plan, Biden ha dicho impulsará el desarrollo acelerado de una vacuna contra la covid-19 y ofrecerá un programa de detección gratuita del virus.

Contratará a 100.000 personas como rastreadores de contactos en todo el territorio nacional y quiere que al menos existan diez centros de pruebas en cada estado. También no dejará que EE UU salga de la Organización Mundial de la Salud (OMS) e implementará un programa de estímulos económicos para enfrentar las consecuencias del virus. 

Dichas propuestas acompañan a lo que, además, se hará en el terreno de la salud. Biden ha dicho que el Obamacare será su apuesta para atender a miles de norteamericanos afectados por el coronavirus. El exvicepresidente demócrata expandirá los subsidios de dicho programa, garantizará el acceso de 'dreamers' y a las personas sin papeles para que tengan cobertura sanitaria e impulsará una ley que proteja la despenalización del aborto. 

Las reformas en salud aterrizan, además, en el afectado terreno económico. El exvicepresidente de Barack Obama ha planteado que haya un aumento de 15 dólares por hora al salario mínimo, plantea subir el impuesto de sociedad al 28%, el tipo máximo del impuesto sobre la renta y un tributo a rentas más altas y grandes empresas.

A ello se le agrega su nueva propuesta: el Green New Deal, un plan de infraestructura de diez años que se piensa realizar con ceros emisiones de gases de efecto invernadero. Además, plantea extender el seguro de desempleo por el coronavirus y negociar con el Congreso un nuevo paquete de ayudas financieras, por un monto indefinido, en la Cámara de Representantes, que hoy tiene bloqueados los US$2,4 billones que exige Trump.

En educación, Biden perdonará la deuda de los préstamos de estudiantes -pagadas con lo recuperado al retirar los recortes de impuestos de Trump-, así como la ampliación de universidad gratuitas y acceso universal para preescolar. 

En tanto, en la inmigración, Biden dio un importante anuncio: la construcción del muro con México no es de suma importancia y, por eso, cancelará este proyecto. Además, detendrá la orden de separación de familias en la frontera con su vecino país. Frente a estas medidas, el demócrata facilitará el acceso a la ciudadanía estadounidense a miles de inmigrantes, quienes no tendrán que sufrir la revocación de los 'green cards' y llenarán el vacío de la escasez de mano de obra local por los trabajos que no quieren hacer los estadounidenses.

Biden también planea cambios en seguridad. Las masivas protestas contra la violencia policial, durante la pandemia, llegó a su punto más crítico a partir del fallecimiento del ciudadano afroamericano George Floyd. Para no afrontar los disturbios que hubieron en varios puntos de EE UU, Biden ha dicho que prohibirá las armas de asalto y aumentará el financiamiento a los policías locales. 

Por otra parte, en justicia, Biden propone acabar con la pena de muerte y ampliar el Departamento de Justicia para tratar la posible mala práctica en departamentos policiales. También habla de eliminar las sentencias mínimas obligatorias y una reforma sobre la marihuana y quitar a su vez condenas anteriores por cannabis. 

En cooperación internacional, Biden propone aumento entre los países de la región financiando y negociando con ellos posibles soluciones a los factores que causan la migración a EE UU desde esas naciones latinoamericanas, como la violencia o la pobreza, así como en la lucha contra la pandemia. Además, el demócrata piensa que para resolver la crisis de Venezuela pasa por negociar la salida del chavismo y asilarlo, acordar con la oposición la transición democrática a nuevas elecciones. También apunta a restablecer los lazos bilaterales con Cuba.

En lo que respecta política exterior, Biden propone restaurar la asociación de EE UU con la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y mantener las capacidades militares de las potencias como Corea del Norte, Irán y Rusia. El demócrata planea retirar las tropas de EE UU en Afganistán y enfocarse en exterminar a los grupos terroristas Al-Qaeda y Estado Islámico en Irak y Siria. Además, está a favor del acuerdo nuclear con Irán y volvería a colocar al país "si Teherán vuelve a cumplir con el pacto". 

Por lo pronto, Biden ya adelantó qué hará el primer día cuando se siente en el Despacho Oval: reintegrará a EE UU al Acuerdo de París en su primer día de presidente. “Hoy, la Administración Trump abandonó oficialmente el Acuerdo del Clima de París. Y en exactamente 77 días, una Administración de Biden se volverá a unir a él”, escribió en su cuenta de Twitter.

El anuncio de Biden llega en el mismo día que EE UU hace efectiva su retirada del pacto firmado por 195 países contra la crisis climática. De hecho, la medida era una promesa de campaña de Trump en los comicios del 2016. El magnate republicano ha dicho que el acuerdo era perjudicial económicamente para el país y que podía costarle el trabajo a 2,5 millones de estadounidenses en 2025.

Sin embargo, en el campo ambiental, no fue la única decisión de Trump: dio marcha atrás en decenas de órdenes y programas impulsados por su antecesor Barack Obama como la eliminación a las protecciones de las perforaciones offshore hasta la supresión de los controles de emisiones de metano en pozos de petróleo y gas. Pero con Biden se piensa cambiar ese panorama:  quiere volver a tender puentes con el mundo en la lucha contra el calentamiento global. @mundiario