¿En realidad existen los postres saludables?
El concepto de un postre saludable es esencialmente el santo grial del bienestar, la manifestación literal de tener tu pastel y comerlo también, pero ¿qué hace un postre saludable?
Indaguemos, ¿puede cualquier cosa que consideremos un postre en realidad ser "saludable", en la forma en que, digamos, los verdaderos alimentos saludables como las coles de Bruselas realmente lo son? ¿Existe tal cosa como un postre "saludable", o simplemente uno que sea ligeramente "más saludable"?
Si te aseguras de que los ingredientes no contengan gluten, sean de origen vegetal y utilicen sustitutos saludables del azúcar, como la miel y el jarabe de arce, obtendrás un pastel saludable disfrazado. Equilibrar la fibra con el azúcar ayuda a disminuir el impacto del postre en el azúcar haciéndolo más saludable.
Hornear con harina de almendras, huevos, aguacates, aceite de aguacate, crema de coco y bayas tiene un valor nutricional y una densidad de nutrientes inherentes, aunque es una forma de postre. Fundamentalmente, sin embargo, las personas no están comiendo un postre porque esperan que sea más saludable, lo están comiendo porque les resulta agradable.
Incorporar ingredientes como el polvo de cacao orgánico, que es una buena fuente de fibra y antioxidantes, y especias como la canela y la nuez moscada que tienen fuertes propiedades antioxidantes, también resultará agradable.
Por lo general, no comemos el postre para estar saludables, sino porque tenemos un deseo de dulce. La palabra postre implica un tipo de indulgencia, así que en lugar de centrarte en cuán saludable es la indulgencia, pon énfasis en la limpieza de los ingredientes, pues reducir la exposición tóxica al elegir opciones orgánicas es la parte más importante de crear un postre "limpio".
En términos generales, una dieta saludable incluye espacio para una indulgencia ocasional que alimenta tu alma. Si no vas a tener el mismo nivel de satisfacción de un postre'saludable que el de una versión clásica que anhelas, entonces céntrate más en cómo hacer espacio para lo que realmente quieres y deje de intentar hacerlo.
Un postre saludable, entonces, es uno que limita el impacto negativo en tu cuerpo, pero alimenta tu espíritu de manera profunda y satisfactoria. Si eso significa una barra de proteína de brownie de chocolate o un helado con crema batida y cubierto con productos lácteos, es tu elección. @mundiario
