Este ingrediente hace que las tostadas francesas sean mucho más sabrosas
¿Alguna vez se te había ocurrido hacer tostadas francesas con jugo de naranja o mermelada? Te decimos cómo.
En la jerarquía de los carbohidratos del desayuno formal, las tostadas francesas van detrás de los panqueques y los waffles por un margen significativo. No puedes culpar al plato: está librando una batalla cuesta arriba: los waffles son divertidos, los panqueques son adaptables y la tostada francesa es… pan.
Podemos adivinar por qué está ocupando el último lugar y por qué, al menos en nuestra opinión, es una comida que solo preparas en casa, nunca pides en un restaurante. La tostada francesa es lo mejor en lo que se puede convertir el pan casi rancio, pero una mentalidad de "agotarlo" no es lo mismo que una mentalidad de "darse un gusto". A pesar de que ocupa un lugar sólido entre los tres primeros desayunos, las tostadas francesas sencillas no son tan especiales.
…a menos que las hagas especiales.
Cómo hacer que las tostadas francesas sean mucho más sabrosas
¿Alguna vez se te había ocurrido hacer tostadas francesas con jugo de naranja o mermelada?
Si lo piensas, los sabores afrutados del jugo de naranja batido directamente en la masa y un puré de frambuesa brillante rociado por encima, es una combinación muy especial.
Para hacerlas, bate el jugo o la mermelada directamente en la masa. El resultado es un plato dulce y sutilmente afrutado, teñido muy ligeramente por el color de la mermelada (aunque normalmente solo se puede ver una vez que se corta por dentro). El azúcar en la mermelada ayuda a que el exterior de la tostada francesa se caramelice un poco más que su variedad estándar, y casi no necesita coberturas adicionales.
Como ves, hacer tu propia tostada francesa con infusión de mermelada es tan simple como batir la mermelada en la masa de tostadas francesas, pero hay algunos consejos que debes tener en cuenta. Primero, comienza con la mezcla de natillas de tu receta clásica favorita y, si estás usando una mermelada muy dulce, omite el azúcar agregada. Cualquier mermelada de sabor funcionará siempre que no sea demasiado espesa, ya que esos trozos más grandes de fruta se quedarán atrás en el tazón de masa.
Revuelve vigorosamente tu mermelada por sí sola primero para suavizarla, después agrega las especias molidas y los extractos que desees. Finalmente, procede como lo harías normalmente dándole al pan suficiente tiempo para remojarse en la mezcla y mucha mantequilla para cocinar. Un poco de caramelización es natural gracias al azúcar en la mermelada, así que vigila cómo las rebanadas se doran. @mundiario
