Alimentación emocional: ¿Comes por hambre o por aburrimiento?

Una mujer comiendo chocolate. / Unplash.
Una mujer comiendo chocolate. / Unplash.
Nuestras emociones nos llevan a alimentarnos de mala manera, al consumir comidas con pocos nutrientes o no consumimos la cantidad adecuada y nuestro organismo se ve afectado.
Alimentación emocional: ¿Comes por hambre o por aburrimiento?

A todos nos ha pasado que en algún momento de nuestras vida no hemos estado de buen ánimo y recurrimos a comer algo sea dulce o salado, y una vez que lo consumimos nos sentimos más tranquilos o aparentemente felices. ¿Quién no se ha comido un chocolate cuando se siente deprimido? Seguro muchos podemos incluirnos en una lista.

Sin embargo, algo de lo que debemos estar atentos con este tema de comer cuando nuestro estado emocional ha cambiado puede ser perjudicial para nuestra salud, debido a que si consumimos alimentos con poca nutrición podemos debilitar nuestro sistema inmune y empeorar así nuestro ánimo. Y recordemos que estamos en tiempos en donde proteger nuestro cuerpo y mente son fundamentales.

¿Escuchaste hablar de la alimentación emocional? Esta no es más que "comer en respuesta de algún evento o estado de ánimo”. Por eso decimos que cuando estamos tristes o hemos pasado por situaciones negativas durante el día, puede darnos más hambre de lo acostumbrado. De igual forma, pasa cuando estamos bajo mucho estrés o ansiedad, estos casos nos generan apetito y pensamos que "comer" es una buena opción para calmarnos.

Lo cierto es que está demostrado que comer alimentos altamente procesados ​​y bebidas con mucha azúcar puede causar inflamación corporal que aumenta la fatiga, la ansiedad y la depresión, justamente son algunos de los que consumimos cuando estamos inestables anímicamente, pero al ingerirlos estos pueden también causar en nosotros sentimientos de culpa.

Mantener un objetivo sobre nuestra alimentación es ideal para no caer en "la alimentación emocional", por eso te sugerimos que realices actividad física dentro de casa, al elegir los alimentos evita los que son estimulantes, como el alcohol, el café en exceso, para tratar de manejar los niveles de ansiedad y estrés.

Además, es importante que tengas en cuenta elegir alimentos frescos, como frutas y verduras, y evitar todos aquellos procesados y llenos azúcares, que suelen darnos placer inmediato subiendo la dopamina y la serotonina, pero que posteriormente generan una sensación de vacío y de querer seguir comiendo.

¿Qué podemos hacer para dejar de comer emocionalmente? Si se te dificulta poder evitar esta situación, recuerda preguntarte antes de comer “¿Estoy a punto de comer/beber porque tengo hambre/sed física o porque me siento estresado o triste?”, no olvides responderte sinceramente, porque eso te ayudará a controlar los consumos pocos saludables.

No olvides que la alimentación puede ser nuestra mejor aliada para fortalecer nuestras defensas y en tiempos de pandemia puede llegar a hacer la diferencia entre si eres más propenso o no a enfermarte. @Mundiario

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