Cansancio ante las viejas políticas que representan Partido Popular y PSOE

"No te presentes y te apoyamos a muerte en cuatro años", "lo haces por una venganza personal", "tú tienes que jugar en política a otro nivel"... Son frases que oír de mediocres serviles.

Luchar contra un engranaje perfectamente articulado, del que fuiste parte, tiene su lado positivo, y su lado negativo en unas elecciones. Sabes perfectamente cómo maniobran tus ahora rivales, sus debilidades, y la perfidia de unos movimientos políticos propios de unos pseudo señores feudales que saben que definitivamente les están moviendo sus poltronas artificiales.

Dejé el Partido Popular hace ya tiempo porque no soportaba la política ficción del engaño permanente a la ciudadanía, del abandono de cualquier defensa del galleguismo, y por supuesto, de la traición de los hijos políticos a sus padres, sin contemplaciones, como si de "Saturno devorando a sus hijos" estuviésemos hablando, o de aquella vieja novela de Robert Graves, "Yo Claudio", con todas las intrigas palaciegas de mediocres, trasladadas a las sedes de formaciones políticas destinadas a ser obsoletas.

Fui de los fundadores de Compromiso por Galicia (CxG), porque parto del convencimiento de la necesidad para esta tierra del galleguismo integrador y progresista, con el que muchos ciudadanos pueden verse identificados, ante el cansancio que provocan las viejas políticas que representan Partido Popular y Partido Socialista. Trasladar esa demanda a la política municipal no es fácil, pero sin duda estoy seguro de que es necesario.

Tomé la decisión de presentarme a la alcaldía de un Concello como Lalín (Pontevedra), después de meditar mucho, y de consultar con muy pocos. Incluso a los más cercanos les causó sorpresa una decisión que se hizo en base al convencimiento de que, tras 25 años de gobierno del actual alcalde, el modelo que defiende está obsoleto y se necesita la entrada de aire fresco.

"No te presentes y te apoyamos a muerte en cuatro años", "lo haces por una venganza personal", "tú tienes que jugar en política a otro nivel", y otra serie de frases del mismo tenor tuve que oír de mediocres serviles, preocupados al ver que se visualiza por fin unha alternativa que nunca creyeron que existiría. Episodios curiosos como el viaje de dos importantes empresarios de Madrid, viejos amigos de mi padre, a ofrecerme el liderato del partido Ciudadanos de Albert Rivera en Galicia, y otros episodios curiosos de presión desde los aledaños del poder político y económico, que os iré contando...

(Continuará)