¿Por qué los ricos muy ricos españoles son tan diferentes a los americanos?

Bill Gates. / Microsoft
Bill Gates. / Microsoft

El comportamientos de los ricos españoles, con tradición de caciquismo, terratenientes, y en un Estado sin tradición democrática, hace que el pueblo siempre se incline a la izquierda sociológica.

¿Por qué los ricos muy ricos españoles son tan diferentes a los americanos?

El comportamientos de los ricos españoles, con tradición de caciquismo, terratenientes, y en un Estado sin tradición democrática, hace que el pueblo siempre se incline a la izquierda sociológica.

En España tenemos ya ricos muy ricos en la lista de los más ricos del mundo, pero su comportamiento difiere bastante bastante entre lo que ocurre aquí con sus fortunas y lo que ocurre en otras partes. En Estados Unidos, que nos vale como ejemplo de capitalismo liberal civilizado, los ricos no son importantes ni admirados por el mero hecho de haber hecho fortuna, es necesario que lleguen al punto de ser donantes y altruistas, de hacer generosas aportaciones muestra de que ya les sobra dinero, mientras que en España nunca parecen tener suficiente.

Las grandes fortunas las han hecho sagas que proviene de un emprendedor con capacidad de riesgo, iniciativa, e inteligencia para los negocios. Ahí están los Rockefeller, los Krupp, los Thyssen, o aquí a nuestro Amancio Ortega, todos con fortunas hechas con mucho trabajo y tiempo, si exceptuamos a los punto com que ha permitido la aparición de grandes fortunas en corto período de tiempo, empezando por Bill Gates, cofundador de Microsoft.

En los mencionados Estados Unidos encontraremos fácilmente donaciones de gente adinerada que muestra su poden regalando parques o zonas de parques públicos, salas de museos, cuadros, monumentos o cualquier otra cosa. Ahora apareció la iniciativa de Bill Gates de dejar la mitad de su fortuna a las organizaciones que se ocupan de los mas necesitados, iniciativa que fué seguida por otros muchos multimillonarios de ese país y del mundo entero, logrando reunir cifras que absorberían el PIB de muchos países juntos. Allí se confía en la iniciativa privada lo que aquí se espera de ayuntamientos o del Estado. ¿Por qué? Porque España siempre fue sociológicamente de izquierdas, por ideología, por proximidad a la Europa socialdemócrata, pero también porque nuestro ricos siempre han sido cutres, caciques, terratenientes con señoritos, oligarcas, y otros poderes que recaían en el Jefe del Estado y la Iglesia, todos enemigos a combatir. La diferencias son los cintos de años que la democracia nos lleva de ventaja en otros países.

Es España un rico rico nunca tiene suficiente, si tiene cuadros los alquila y si tiene otras propiedades las arrienda. Cierto es que hay fundaciones de las empresas que realizan una función social al mismo tiempo que desgravan impuestos, pero no hay verdadero altruismo, ese decir mira, yo sé hacer riqueza pero luego la reparto generosamente. Es verdad que tenemos el ejemplo que ha empezado a despuntar con la donación de un millón de Euros a la Cocina Económica de A Coruña por parte de Amancio Ortega, y ahora de 20 millones de euros a Cáritas, o al menos he visto esas cifras escritas, pero es es una insignificancia comparado con lo que se menciona del capitalista americano. También la fundación de la Duquesa de Alba ha donado importantes cifras a organizaciones eclesiásticas que se supone irán a gente necesitada, pero no son hacia es suficientes para sentirse admirados o que los ciudadanos confíen en este sistema que crea riqueza pero no siempre la reparte mínimamente, sino que la acumula, la protege, la diversifica, la esconde, en un sinfín de acciones que nunca parecen suficientes.

Si los ricos muy ricos quieren sobrevivir sin odio e insana envidia del pueblo, mas les valdría tener una actitud más solidaria para que se vean como algo útil, gente que lleva sus barcos a buen puerto y no sus yates a las Bahamas.

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