La conexión a Internet en América Latina y Caribe, un handicap para el crecimiento

Nicaragua es el país de América Latina con menos usuarios por habitante y el de peor banda ancha. Cuba es uno de los países con menor tasa de conectividad del mundo.

El estudio sobre el "Estado de la banda ancha en América Latina y el Caribe 2015" realizado por la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), dejó datos sobre la velocidad de conexión, el porcentaje de población usuaria y la facilidad de acceso a la banda ancha.

El país donde la velocidad de conexión es mayor es Uruguay, tanto en cargas como en descargas, disfrutando este país de una velocidad promedio muy similar a la de países como España, Portugal o Inglaterra.

La velocidad de descarga promedio en la región es de 7,26 megabites por segundo, pero Uruguay se encuentra por encima de este promedio junto a Chile, Brasil y México.

Las menores velocidades de descarga se dan en Bolivia, Paraguay y Venezuela.

En cuanto a número de usuarios Nicaragua tiene el menor número de usuarios por habitante (no llega al 20%). Mientras que Chile es el que mayor usuarios tiene.

En cuanto a banda ancha (conexiones con velocidades superiores a los 254Kbit/s en el caso de la banda ancha fija, y de tecnología de al menos 3G en el caso de la banda ancha móvil, según CEPAL). El país con mejor difusión de la banda ancha móvil es Costa Rica. El segundo mejor posicionado es Brasil y el tercero, Uruguay.

Los tres peor posicionados son Nicaragua, Perú y Guatemala.

¿Y en el país insular del Caribe, Cuba?

Un ejemplo claro lo recoge Lilianne Ruíz en la información para la web14ymedio.com. "He tardado más de una semana para acceder a archivos que pesaban en total 2 GB. Por suerte, Dropbox es uno de esos gestores que te permite avanzar por partes. No obstante, no puedo acceder a la información de libros y artículos de pago.", cuenta Daniel Ramírez, licenciado en matemática por la Universidad de La Habana, que trabaja en un instituto de investigación en la capital.

Hace aproximadamente dos años, Cuba se quedó sin la ayuda de HINARI. El programa HINARI establecido por la OMS, junto con las principales editoriales, permite a los países de bajos y medianos ingresos acceder a una de las mayores colecciones del mundo de literatura biomédica y salud. Hasta 14.000 revistas (en 30 idiomas), 46.000 libros electrónicos, y 100 fuentes de información se encuentran ahora disponibles a las instituciones de salud en más de 100 países, zonas y territorios beneficiando a muchos miles de trabajadores e investigadores en salud, contribuyendo así a una mejor salud mundial.

Pero actualmente HINARI ya no presta servicios en la isla. "Felicidades. Cuba ya no cumple con los requisitos para recibir nuestra ayuda". Es el mensaje que recibió el doctorado en bioquímica de Ariel Sánchez cuando fue a consultar la web de HINARI.

El acceso a Internet es, a día de hoy, algo primordial para el desarrollo de un país y Cuba es uno de los países con menor tasa de conectividad del mundo, con solo el 5 %, porcentaje que se reduce al 1 % en el caso de la banda ancha.