La gran ganadora fue la fotografía tomada por Burhan Ozbilici, en donde retrató el asesinato del embajador ruso en Ankara. La imagen fue un shock mundial y un reflejo de un hombre desesperado y loco. El resto de las ganadoras son hermosas, aterradoras e impactantes, verdaderos destellos de los sucesos y sociedades de todo el planeta.