¿Cómo hacer que los coches autónomos sean seguros para los peatones?
Los peatones aseguran su seguridad haciendo contacto visual con los conductores humanos, por lo que los vehículos autónomos tendrán que comunicarse con la gente de alguna manera.
El número de peatones que mueren o resultan heridos en el mundo es siempre bastante considerable. En Estados Unidos por ejemplo, esa cifra ha subido de un 25 por ciento desde 2010 a más de 5.000 personas en 2015, y ahora el amanecer de los coches sin conductor ofrece la promesa de mejorar ese triste récord.
Ya sea que estemos en un cruce de caminos, un semáforo, o simplemente caminando por el medio de la carretera, hemos aprendido desde pequeños que es importante establecer contacto visual con los conductores de los automóviles que se acercan. Pero eso no va a ser posible con vehículos autónomos.
Incluso si hay alguien sentado en lo que sería el asiento del conductor, esa persona será un pasajero, con poco, o tal vez ningún, margen de control sobre cómo se comporta el auto. Y ese pasajero también puede ponerse al día en el trabajo, ver una película o dormitar, sin prestar atención a lo que está por delante.
La gente y los coches necesitarán comunicarse de otra manera. Sin un método universalmente acordado para ello, varias empresas de tecnología y fabricantes de automóviles están explorando el uso de diferentes tipos de señales visuales que puedan ayudar a aliviar algo que podría convertirse en un serio problema.
Las señales podrían verse bastante simples, como la presentación de una frase basada en texto que diga: "seguro cruzar". Esto puede funcionar para un único paso de peatones frente a un solo automóvil en una carretera de dos carriles. Pero hay muchos escenarios más complicados.
Por ejemplo al cruzar una carretera de cuatro carriles es difícil saber a quién le tocaría cruzar en qué momento. La aparición de estos signos también es importante. Si un mensaje como "seguro cruzar" es para ser leído claramente a 100 pies, las letras deberán ser por lo menos de unas seis pulgadas de alto. Eso requeriría poner el mensaje en una pantalla de casi cuatro pies de ancho. Si están en vehículos en movimiento, los mensajes probablemente tendrán que ser aún más grandes.
Por supuesto, una señal es inútil si nadie la mira. Esa es una preocupación planteada por un estudio realizado en el 2016, en el que se comparan diferentes tipos de pantallas en el frente de una camioneta que disfrazada para parecer que no tenía conductor humano. El estudio reveló que sólo el 12 por ciento de los peatones usaban las pantallas para ayudarles a decidir cuándo cruzar.
La mayoría de las personas dependían de sus viejas estrategias de cruce, como evaluar la velocidad y la distancia de los vehículos que se aproximaban para asegurarse de que tendrían tiempo para cruzar. A medida que los autos impulsados por el ser humano se vuelven menos comunes, los laboratorios seguirán estudiando cómo responden los peatones, para quesea posible garantizar mejor la seguridad de todos.
