George Pell, el número tres del Vaticano se enfrenta a denuncias por abusos sexuales a menores
Un nuevo escándalo vuelve a sacudir los cimientos de la Iglesia Católica y el gobierno del Papa Francisco.
El cardenal George Pell es el encargado de las Finanzas de la Santa Sede y es uno de los pilares fundamentales de la reforma que impulsó el Papa Francisco desde sus comienzos en el poder. Pero ahora, todo puede venirse abajo por culpa de unas acusaciones por abusos sexuales a menores que pesan sobre la cabeza de Pell.
El nombre de Pell resonó con cierta sorna casi desde el principio, puesto que su nombre nunca agradó. Ahora, el cardenal se encuentra en Australia para defenderse de la policía que lo acusa de haber cometido abusos sexuales contra menores de edad en su país cuando era sacerdote.
Luego de que la autoridad australiana solicitara su presencia en el país, el cardenal enfrentó a los medios de comunicación en una rueda de prensa convocada rápidamente. “Estos problemas llevan siendo investigados dos años. Se han filtrado a los medios, es un asesinato implacable”, expresó muy molesto el cardenal. “La misma idea del abuso sexual me parece aberrante”, leyó la autoridad en un breve comunicado ante los medios. “Estoy esperando que llegue mi día en el tribunal para defenderme. Soy inocente de estos cargos. Son falsos”.
El próximo 18 de julio el Ministro de Economía del Papa argentino deberá comparecer ante la corte que lleva investigando las denuncias de abusos sexuales a menores que supuestamente ocurrieron durante años y los altos mandos de la Iglesia australiana se encargaron de encubrir. El nombre de Pell no es nuevo, ya que en una primera instancia fue acusado de encubrir los delitos de muchos de sus compañeros del sacerdocio, pero ahora, es formalmente acusado de haber cometido actos impropios contra menores.
Los medios australianos se han encargado de buscar a las víctimas del que fuera sacerdote de un pueblo en el estado de Victoria en la década de 1970 y luego arzobispo en Melbourne entre 1996 y 2001. Según expresan los medios, dos hombres que ahora tienen 40 años aseguran que cuando eran niños Pell solía tocarles sus genitales y en varias ocasiones se mostró desnudo ante ellos. Las acusaciones de las víctimas fueron plasmadas en el libro El cardenal: ascenso y caída de George Pell, escrito por Louise Milligan, una reconocido periodista de la Abc.
La Real Comisión sobre la Respuesta Institucional a los Abusos Sexuales contra Niños en Sidney se había encargado de interrogar a Pell en varias ocasiones por medio de videoconferencias y en una ocasión, una comisión especial fue enviada a Roma para hablar directamente con el cardenal.
Ahora, solo resta esperar para ver que será de la apuesta del Papa Francisco para manejar las finanzas de la Santa Sede. De confirmarse las acusaciones por abuso sexual de parte de Pell, los cimientos de la Iglesia Católica que el Papa ha intentado renovar se sacudirán y la fe verá una de sus épocas más oscuras.
