¿Llegará el familiar plasta que nunca falta por Navidades?

cena
Porque pasamos hambre, pero hay familiares que te quitan el apetito...

Cuando llegan las Navidades siempre aparece por casa ese familiar alegre que te da ganas de que los peces que beben en el río se lo coman.

¿Llegará el familiar plasta que nunca falta por Navidades?

Cuando llegan las Navidades siempre aparece por casa ese familiar alegre que te da ganas de que los peces que beben en el río se lo coman.

 

Ya estamos en Navidades, ya estamos con las compras, ya estamos que si regalo esto o lo otro, o que esto no que ya lo tiene pero aquello no lo sé y voy a llamar por teléfono y...  y que también lo tiene, ¡y cómo no lo va a tener si ya tenemos de todo!

Y cuando ya lo de las compras esta medio solucionado las dos frases de siempre que animan que no veas: «igual este es mi ultimo año», que lo viene diciendo desde la batalla del Ebro y hasta a veces piensa «a ver si es verdad, hombre, a ver si es verdad». Y la otra, la que más mola y remola «hoy no estará en la mesa», que lo mismo lo dice tu hermano, tu herma que el gato de casa. Anda, escucha estas dos frases cinco o seis veces estos días y a ver si eres capaz de cantar el «pero mira como beben los peces en el río...»  que en el río metía yo a alguno.

Pero vamos a ver alma de Dios ¿es que con 80 o 90 o 150 años iba a estar aún en la mesa? ¿es que quieres que un día ya viniera los de la Facultad de Antropología y entre mazapán y mazapán lo estudiaran a ver cómo era posible que aún estuviera vivo? ¿y si a lo mejor él, justo él estaba harto ya de estar en la mesa, que 90 tacos son muchos tacos de dios para aguantaros? Pues no, el personal, que si falta o deja de faltar y que si un día dijo...

Joé con las Navidades, por qué no piensas en lo bien que lo pasó en su vida, en lo que disfrutó e te hizo disfrutar, en lo que te quiso y te quiere porque siempre lo tienes y tendrás a tu lado, en los buenos momentos. Anda pesao, en vez de un pañuelo toma esta toalla, que aun vas a estropear el barniz de los cojones.

Joé que plastiña me eres y sí, si al final vas a tener u razón que es una desgracia, pero una desgracia no que no es que no este él, sino que estés tú, con esa alegría que te caracteriza.  Anda, mira lo bueno de la vida, dale al turrón, al champán, recuerda los bueno momentos y no des la vara. De verdad que estar contigo en estas fechas en un currele...

 

 

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