Rajoy se mofa de la oposición por no poder derrotarlo en las elecciones

Mariano Rajoy se presentó esta mañana en el Congreso de los Diputados para comparecer por el caso Gürtel, una carpeta que investiga y juzga la supuesta financiación irregular del PP. El presidente de Gobierno se subió a la tribuna de la Cámara Baja y durante media hora, en la que fue su primera intervención, evitó pronunciar las palabras clave de esta trama corrupta, la misma por la que ya se había presentado ante la Audiencia Nacional en julio. Así, el jefe de Gobierno centró esa primera intervención en las críticas a la oposición, a la cual llegó a acusar de tener un "celo inquisitorial", y luego sacó pecho por las medidas de regeneración que han aprobado su Administración.

Sus primeras palabras las dedicó a los atentados de Barcelona y Cambrils, y luego enlistó las que veces que ya ha dado explicaciones en el Parlament sobre la resonante corrupción de su partido y llegó a calcular estas veces en nada menos que 52, sin contar obviamente todas las que su partido vetó cuando tenía mayoría absoluta en el parlamento.

"En este Congreso he tenido 52 intervenciones relacionadas con estas cuestiones. En todos los debates del estado de la nación, en los debates de investidura... y en las sesiones de control he respondido a 32 preguntas desde febrero de 2012. Solo hablo de los debates en los que he intervenido como presidente en el Congreso. A mayor abundamiento, hay dos comisiones parlamentarias trabajando sobre lo mismo. Además, la moción de censura", dijo.

"Me he sometido siempre al control de esta Cámara", continuó, "porque es mi obligación como presidente. Otra cosa es que a algunos de ustedes no les guste nada de lo que hago, que pretendan que les de la razón. No puedo aceptar estos planteamientos".

Así, el jefe del Ejecutivo encaró a la oposición por su "celo inquisitorial" respecto a este tema y les criticó por no centrarse en lo que él estima como "prioridades del país". "Algunos de ustedes decidieron que yo compareciera aquí para volver a hablar de lo mismo. En esta ocasión y ante la ausencia de cualquier elemento nuevo. Tienen derecho a pedir mi comparecencia, a pesar de las intenciones del celo inquisitorial de algunas señorías. Ya he informado en 52 oportunidades, y a la vista de los problemas no se entiende la necesidad de un debate sobre este asunto, y que no nos centremos en otros", atacó.

Tanto el presidente como el PP negaron que la corrupción política sea un tema importante, con todo y que la ciudadanía le sitúa como el segundo asunto más preocupante del país, de acuerdo a datos del CIS. Rajoy ha dicho que, según su criterio, el terrorismo y el desafío independentista de Cataluña son más importantes para España a día de hoy.

Presume sus triunfos en las urnas

Posteriormente, criticó a los partidos promotores de esta iniciativa, cómo no Unidos Podemos esta vez con la ayuda del PSOE, puesto que lo ve como un ataque directo al partido, toda vez no se ha atacado a su Gobierno, sino a la misma agrupación y nada más. "Lo primero que me llama la atención de esta petición, es que se justifique no por actuaciones de mi Gobierno, sino por actuaciones de mi partido, y algunas de hace más de 20 años. A la vista de este insólito desinterés por el Ejecutivo, debo pensar que lo hacemos con tanto acierto que no hay motivos para sus críticas. O que ustedes no se toman el trabajo de buscarlos y prefieren seguir transitando un camino trillado.  También resulta pintoresca su obsesión de juzgar a mi formación política, no al gobierno de España".

"Su suma de minorías no sirve para enmendarle la plana a la voluntad de los españoles en las urnas: resulta más ecuánime el juicio de los españoles que el de algunas de sus señorías en sesiones como esta", subió el tono después. Con esas palabras, el presidente del Gobierno le recordó a los grupos que solicitaron su presentación ante la Cámara que si de verdad quieren removerle de su puesto, tendrán que ganarle en las urnas.