Puigdemont creará un registro de funcionarios voluntarios para el referendo

Carles Puigdemont, expresidente de la Generalitat de Cataluña. / RR SS
Carles Puigdemont. / RRSS

El Gobierno catalán sigue adelante en sus planes para la consulta independentista. El presidente compareció ante el Parlamento y se llevó nuevas críticas de la oposición.

Puigdemont creará un registro de funcionarios voluntarios para el referendo

El Gobierno de Cataluña sigue avanzando y revelando sus planes para el referendo independentista del próximo 1 de octubre. Este mismo miércoles, Carles Puigdemont, presidente del Govern, ha dicho que celebrará una jornada con "agentes electorales", un séquito de voluntarios que podría ser integrado por civiles y, si lo quisieran, funcionarios de su Administración.

"En ningún lugar dice que los funcionarios tienen que participar en la organización de procesos electorales", dijo frente a los diputados de la asamblea catalanada, manifestando eso sí que no "se les forzará" a quienes no deseen tomar parte del grupo en cuestión. De acuerdo a sus argumentos, la legislación estatal dicta que pueden colaborar con la organización de la consulta como "trabajadores voluntarios" sean o no funcionarios públicos.

El Govern acude a esta estrategia para evitar lo que sería un posible choque de legalidades que podría dejar consecuencias negativas para su equipo, uno de los temas que, desde los sindicatos del sector público y desde la oposición, se ha acusado de ser uno de los puntos débiles en el plan del referendo sin acuerdo.

Este inciso es uno de los tantos que Puigdemont deberá explicar de aquí a finales de junio, fecha en la que, asegura, estarán listos todos los detalles "técnicos y legales" para poder acudir a las urnas "con garantías" este 1 de octubre. Otro de los temas es la creación de una comisión de expertos internacionales, que estará a cargo de vigilar que se cumplan todas las garantías del referendo y que la jornada transcurra sin alteraciones.

La Generalitat espera trabajar y terminar todo durante este verano, o cuando menos apurar los detalles con los que se llevará a cabo la consulta popular. Con ese fin ha anticipado una campaña informativa, aunque Puigdemont no reveló más detalles al respecto.

Sus palabras, eso sí, no dejaron satisfecha a la oposición, que ha censurado el avance en este proyecto presidencial. "Están en un Titanic que se está hundiendo", se mofó Inés Arrimadas, jefa de Ciudadanos en Cataluña. Arrimadas acusó a Puigdemont y sus hombres de querer llevar a sus funcionarios a cometer ilegalidades. Miquel Iceta, líder del PSC, pidió al presidente que explicará puntualmente cómo llevará a cabo la consulta.

Apenas el martes, la Fiscalía catalana confirmó que presentaría una querella contra Puigdemont por la compra de urnas para el referendo, entre otras cosas. Su proyecto fue criticado desde su inicio, e incluso desde Madrid le llamaron a "no jugar con los sentimientos de los catalanes", como expresó Rafael Hernando, vocero del PP. El referendo es ilegal por todos los ángulos, pero el presidente catalán no parece dispuesto a torcerse.

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