La primera ministra británica se suma a la condena general del régimen de Maduro
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Gran Bretaña ha mantenido durante años a Venezuela "bajo observación" debido al alto número de violaciones de derechos humanos en su territorio.
Esta semana, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Reino Unido dio a conocer un nuevo informe sobre Venezuela titulado Derechos Humanos y Democracia a partir de 2016, que dice lo siguiente:
"La situación de los derechos humanos en Venezuela sigue siendo una preocupación para el Reino Unido, en particular en torno a los continuos problemas socioeconómicos y altos niveles de violencia. La inflación, y la escasez de alimentos y medicamentos, continuaron a lo largo de 2017, así como altos niveles de protesta y saqueos. En el año 2016, también hubo informes sobre el deterioro de la libertad de los medios de comunicación y el acceso a la información, así como sobre la intimidación y el hostigamiento de los defensores de los derechos humanos”.
El gobierno británico también reconoce a través de su ministerio que la oposición venezolana y varias organizaciones de la sociedad civil acusan al gobierno venezolano de detener a más de 100 presos políticos, entre ellos figuras prominentes de la oposición. Después de analizar la situación de Venezuela, el gobierno británico se comprometió a "promover los derechos humanos y la democracia en Venezuela".
La primera ministra británica, Theresa May, fue más allá y respaldó el informe al hacer una declaración a través de su portavoz: "Es una tragedia que tantas personas hayan perdido la vida en las protestas en Venezuela. Está claro que hay que tomar medidas urgentes para evitar que la situación empeore. Reino Unido ha pedido reiteradamente al gobierno de Maduro que trabaje con la oposición, libere a los presos políticos, y muestre respeto por la democracia y los derechos humanos.”
El partido conservador también criticó al líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, por su renuencia a condenar la dictadura de Maduro en Venezuela. Después de recientes discusiones sobre el tema entre el Partido Laborista y Conservador, The Guardian ha demostrado que la posición del gobierno respecto a Venezuela no ha sido todo lo consistente que debería.
Aunque Venezuela está en una lista de países bajo la observación del Ministerio de Relaciones Exteriores, el gobierno británico no ha dejado de vender armas a ese país, lo que pone en duda la autenticidad de las críticas recientes. Según informes, Inglaterra vendió equipo militar a Venezuela por más de una década.
En total, 2,5 millones de libras en suministros militares han sido vendidos al país sudamericano desde 2008, incluyendo componentes para radares militares, exhibidores de armas, y motores de avión. Las cifras del año pasado, hasta marzo de 2016, muestran licencias aprobadas para activos por valor de más de 80,000 libras esterlinas, incluyendo equipos de control de multitudes que serían utilizados por las agencias policiales.
