Una nube rusa se cierne sobre la tambaleante presidencia de Donald Trump
La intriga rusa amenaza con hundir la política de Washington ahora que el yerno y asesor de Trump, Jared Kushner, ha ofrecido testificar sobre las reuniones con altos funcionarios del Kremlin.
Quizá motivado por el aumento de la especulación sobre Rusia, Trump echó mano del Twitter el lunes por la noche, posiblemente para distraer la atención de las historias "rusas" que dañan considerablemente a su Casa Blanca. "¿Por qué el Comité de Inteligencia de la Cámara no está estudiando el acuerdo de Bill y Hillary que permitió que el gran uranio fuese a Rusia, el discurso ruso ... dinero a Bill." escribió el presidente de la nación en un tweet.
Pero la tormenta parece no tener un final cercano, ya que habrá nuevos titulares relacionados con Rusia el jueves, cuando una audiencia del Comité de Inteligencia ofrezca a los senadores su primera oportunidad de atajar en profundidad todo lo relacionado con la administración Trump y la inteligencia rusa.
La ráfaga de acontecimientos dio testimonio de la incapacidad de la Casa Blanca para sacudirse una controversia sobre Rusia que repetidamente vuelve a asediar a la nueva administración, agravando el costo político de sus pasos en falso en otros lugares.
Las nuevas revelaciones sobre Rusia ensombrecieron un intento más de los asesores de Trump de reparar las relaciones con el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, que se tensaron en el ya conocido fracaso de la salud.
Sumado a ello, las revelaciones del lunes complicaron aún más el panorama político. Jared Kushner, asesor de confianza y yerno de Trump, se ofreció a testificar sobre su papel en la organización de reuniones entre los principales ayudantes de la campaña y el enviado ruso a Estados Unidos, Sergey Kislyak. Se reunió con Kislyak en diciembre durante la transición presidencial y envió a su asistente, Avrahm Berkowitz, a una segunda cita.
Kushner también se reunió con Sergey N. Gorkov, jefe del banco de desarrollo económico de Rusia, a instancias del embajador ruso. Gorkov tiene profundos lazos con el gobierno ruso y fue nombrado por Putin. La reunión entre Kushner y Gorkov está atrayendo intriga extra porque VneshEconomBank, o VEB, ha estado bajo sanciones de EE UU por tres años, y porque Kushner ha estado intentando atraer la financiación para un proyecto de edificio suyo en Manhattan.
