Muere el ministro de Estado en Marruecos atropellado por un tren

Se trata del líder islamista Abdaláh Baha, atropellado por un tren en un accidente cuyo escenario fue el mismo lugar en que murió hace pocas semanas otro líder político socialista.

El ministro de Estado Abdaláh Baha murió este domingo por la tarde en un accidente ferroviario en la región de Bouznika alrededores de Rabat tal como anunció el Ministerio del Interior de Marruecos en un comunicado oficial. El comunicado de Interior declara que "la Gendarmería Real inició inmediatamente una investigación para determinar las circunstancias exactas del accidente", afirmando que los resultados de la investigación serán comunicados una vez acabada ésta.

La prensa digital marroquí empezó a difundir masivamente la información de la muerte de Abdaláh Baha en medio de la sorpresa y asombro de los activistas de las redes sociales sobre todo cuando se desveló el lugar preciso del accidente mortífero, ya que fue exactamente allí donde murió otro líder político hace tan sólo muy pocas semanas a saber: Ahmed Zaidi el muy reputado parlamentario del partido Unión Socialista de Fuerzas Populares, quien murió hundido en aguas de lluvia acumuladas bajo un puente de su localidad natal Bouznika.

Muchas fuentes informativas aseguraron que el Ministro de Estado Abdaláh Baha estuvo visitando ese lugar hacia el cual se mudó solitario quizás para recordar al difunto Ahmed Zaidi antes de caer atropellado por un tren después de haber bajado de su coche para contemplar de cerca el ya famoso Puente de Río Cherrat hallado en una zona ferroviaria. La misma versión de esta noticia fue adoptada por el ministro de Comunicación y portavoz del Gobierno a través de una publicación no oficial en su página de Facebook.

La triste noticia de la muerte del ministro de Estado marroquí y el vice-presidente del Partido de Justicia y Desarrollo Abdaláh Baha sorprendió tanto a muchos políticos como a todos sus compañeros en el partido del PJD, que lidera el Gobierno de Marruecos, pero el más sorprendido sin duda fue el presidente de Gobierno Abdeliláh Benkirán, que preside también dicho partido. Siempre se había considerado al difunto como la caja de sus secretos, su gran asistente y consejero en los asuntos de la presidencia del gobierno y por supuesto su compañero de militancia desde los comienzos de la fundación del movimento islamista marroquí en los años setenta del siglo pasado.