Kuczynski se enfrenta al Congreso peruano que pide su renuncia por el Caso Odebrecht

El presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski (PPK) salió a responder los cuestionamientos de la oposición, que en la víspera exigió su renuncia al cargo luego de la revelación hecha el último miércoles por la Comisión Lava Jato de que la constructora brasileña Odebrecht pagó US$ 4,8 millones por asesorías a las empresas Westfield Capital y Firts Capital, con los que tenía una estrecha vinculación entre noviembre del 2004 hasta marzo del 2014.

En un mensaje a la nación que duró apenas tres minutos y acompañado por los miembros de su gabinete y de algunos diputados oficialistas, el mandatario señaló que no piensa dimitir. "La corrupción sistémica pretende amenazar nuestro Gobierno y nuestra democracia. Compatriotas: no me voy a dejar amedrentar".  

PPK anunció que pedirá a la fiscalía que le levanté su secreto bancario. "No voy a abdicar ni a mi honor ni a mis valores ni a mis responsabilidades como presidente de todos los peruanos, Estoy dispuesto a defender mi verdad. Nos costó mucho recuperar esta democracia. No la volvamos a perder".

La situación previa al pronunciamiento del jefe de Estado, había tenido en vilo a todo el país. La información proporcionada por Odebrecht al grupo congresal -que investiga las coimas que se realizaron- agitó más las tensiones entre el gobierno y la oposición debido a que Kuczynski Godard había negado en más de una oportunidad trato alguno con la firma brasileña. En los medios de comunicación, a los diputados de la oposición, a la opinión pública en general.

El contexto cambió cuando se descubrió sus primeros nexos con la cuestionada compañía brasilera. La revista Caretas dio cuenta de la aparición de su nombre en Firts Capital, compañía que era de propiedad de su amigo, el empresario chileno Gerardo Sepúlveda. El último sábado, días después de difundirse esta información, el jefe de Estado tuvo que aceptar que asesoró a una empresa que tuvo a Odebrecht en su consorcio.

En las primeras horas de la mañana de ayer, la coalición izquierdista Frente Amplio fue la primera en anunciar que presentaría la moción de vacancia presidencial contra PPK ya que su permanencia era insostenible. Este anuncio con el transcurrir de las horas encontró eco en otras bancadas como el fujimorismo y el Partido Aprista Peruano, aliados en el Congreso, que se sumaron a impulsar un juicio político contra Kuczynski.

Daniel Salaverry, vocero de la mayoría Fuerza Popular, señaló que esperaba la renuncia del presidente por sus vínculos con Odebrecht. “Ha tenido tiempo suficiente para evaluar su delicada situación y tomar esta decisión”, dijo en conferencia de prensa. Javier Velásquez, representante aprista, añadió que si PPK no podía dimitir, la propuesta de declararlo incapaz moral para dirigir la nación era una opción latente que podía el Congreso tomar contra él.

Los cálculos –hasta ese momento- daban cuenta que tres grupos parlamentarios estaban a favor de la salida del exbanquero de Wall Street. Según la Constitución peruana, la figura de la vacancia presidencial para que pueda ser aprobada necesita de 87 votos en el pleno extraordinario. Frente Amplio (10), Fuerza Popular (71) y Apra (5) superarían tal cantidad prevista.

El panorama agudizó aún más por la noche cuando Alianza para el Progreso –aliado del actual régimen- también se alineaba al pedido de la dimisión presidencial. “Exhortamos y demandamos al presidente, Pedro Pablo Kuczynski, a renunciar a su cargo por el bien de la democracia y en pro de la gobernabilidad. De no producirse la renuncia que la nación espera y demanda, Alianza para el Progreso presentará el pedido de vacancia presidencial por el bien del país”, indicó el documento sobre la postura oficial del partido.

La disputa de poder, como se recuerda, entre el presidente y la comisión Lava Jato data desde octubre pasado cuando PPK se negó a recibirlos para que responda por su participación en la adjudicación de los tramos 2 y 3 de la Carretera Interoceánica a Odebrecht, en el régimen del hoy prófugo expresidente Alejandro Toledo (2001-2006). Ello ocasionó en más de una oportunidad, dimes y diretes.

En la tarde, cuando los medios de comunicación aguardaban algún mensaje, Kuczynski estaba en su casa en el distrito de San Isidro recibiendo a miembros de su partido y del gobierno. Las primeras informaciones indicaban que el presidente quería comunicarles lo que iba a realizar en adelante para defenderse de los ataques que lidera el fujimorismo.

Además de la citación del próximo 21 cuando sea interrogado por el fiscal que dirige el equipo especial anticorrupción del caso Odebrecht, Hamilton Castro. También de su comparecencia ante el grupo Lava Jato, al día siguiente.

Según los analistas políticos que fueron entrevistados por la actual situación en el país, en caso el Congreso destituya a Kuczysnki por incapacidad moral, el primer vicepresidente Martín Vizcarra debía asumir el cargo. El diario El Comercio había informado, precisamente, que el exministro de Transportes y Comunicaciones que fue involucrado en la controversia del Aeropuerto de Chinchero, Cusco,  decidió adelantar su retorno al Perú desde Canadá, donde es embajador.  

De momento, el Pleno del Congreso se ha declarado en sesión permanente y hoy se discutirá el futuro de Pedro Pablo Kuczysnki y su gobierno, que en estos momentos sufre una aprobación muy baja producto de las malas decisiones políticas que se adoptaron desde el comienzo de este quinquenio. @mundiario