¿Habrá juego sucio por parte del Partido Socialista de Nicolás Maduro?

Nicolás Maduro inaugurando una ruta de metrobuses en plena campaña electoral. / Twitter
Nicolás Maduro inaugurando una ruta de metrobuses en plena campaña electoral. / Twitter

El domingo 6 de diciembre se celebran elecciones parlamentarias en Venezuela, con un país sumido en el caos social y económico y un Maduro en caída libre.

¿Habrá juego sucio por parte del Partido Socialista de Nicolás Maduro?

Las elecciones parlamentarias en Venezuela se celebran el domingo 6 de diciembre y aunque las recientes encuestas de las cinco principales encuestadoras del país otorgan una derrota al Partido Socialista de Nicolás Maduro, las tácticas en el cambio de la Ley Electoral no dejan tan claro quienes serán los vencedores, si el manoseado chavismo o la sempiterna oposición, ahora unida en su mayoría bajo las siglas MUD (Mesa de la Unidad Democrática). A través de 87 circunscripciones electorales serán elegidos en total 167 diputados: 113 por voto nominal, 51 por voto lista y tres representantes indígenas. Pero tal y como explica Eugenio Martínez, periodista especializado en la fuente electoral en el diario El Universal y especialista en Marketing Político, en una entrevista al periódico larazon.net:  “Este año se modificó la cantidad de diputados en algunas circunscripciones. El tema con esos cambios es que disminuyó la cantidad de diputados que se escogen en zonas con una tendencia histórica muy marcada a ser opositora y se aumentó en zonas con una tendencia histórica que favorece al chavismo.”

Está claro que lo mejor que le puede pasar a Venezuela es que Nicolás Maduro y su partido pierdan el control del país tras 17 años en el poder y con una Venezuela, actualmente, azotada por la alta inflación, escasez de productos básicos, las altas importaciones que lastran la actividad de empresas privadas y producción propia de bienes…

Nicolás Maduro habla de guerra económica echando balones fuera de su campo de juego, como siempre hace, con el fin de convencer a los venezolanos que cada vez se creen menos las reiteradas mentiras de un gobernante en caída libre. No sería de extrañar que jugará sucio en estas elecciones con el fin de seguir enquistado en el poder a pesar de no hacer ningún bien al pueblo que dice amar.

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