El guión de MUNDIARIO ante la gran tragicomedia catalana se ha cumplido al 100%

Angela Merkel, canciller alemana. mirror.co.uk
Angela Merkel, canciller alemana. / mirror.co.uk

Tardará en haber acuerdo porque las partes están, aparentemente, muy distantes y precisan ir resituando a sus bases. Pero el vector resultante suena a pacto o, si se prefiere, no suena a independencia. No pasa nada, no pasará nada que Alemania no quiera que pase.

El guión de MUNDIARIO ante la gran tragicomedia catalana se ha cumplido al 100%

MUNDIARIO, el 9 de octubre de 2017 a las 18:02 h.: "La resolución del grave conflicto catalán puede ir para largo, no sin ambigüedades. La presión es máxima sobre Puigdemont, a fin de que suavice sus posiciones, pero si lo hace aún no se resolvería nada, ya que Madrid no aceptará el diálogo hasta que también se avenga a negociar dentro del Estado de derecho. La presión económica no bajará y Alemania apoyará a España."

11 de octubre de 2017 a las 12:15 h: Todo se ha confirmado. Tras suavizar Carles Puigdemont sus posiciones el martes 10 –no sin ambigüedades–, este miércoles 11, Mariano Rajoy requirió al presidente de la Generalitat que aclare “si ha declarado la independencia” e instó al Govern de la Generalitat a volver a la “legalidad” dentro del Estado de derecho. Es la antesala del diálogo y del estudio de una reforma constitucional. Nada urgente pero sí importante. La presión económica, por si acaso, no baja. Planeta se ha ido a Madrid y son cada vez más las empresas que trasladan fuera de Cataluña no solo su sede social, sino también la fiscal. Alemania –léase también la Unión Europea– apoya a España. Sin ambigüedades.

La fuente del guión de MUNDIARIO –expresado también en varios programas de la RTVG en las últimas horas– no es catalana, ni es española, es alemana

La fuente principal del guión del análisis de MUNDIARIO –expresado también en varios programas de la RTVG en las últimas horas y a través de la agencia Europa Press el pasado fin de semana– no es catalana, ni es española, es alemana. Una vez más se confirma que, a la hora de la verdad, Alemania –léase de nuevo la Unión Europea–, marca la pauta general. En España –y no digamos en Cataluña– queda margen para los detalles. Si se quiere ver de otro modo, los alemanes se encargan de la arquitectura y aquí se hacen los decorados. Eso sí, exigen que no haya roces entre los pintores y los guardias de seguridad de la obra.

Curiosamente, será difícil encontrar manifestaciones públicas de Alemania que den idea de su verdadero poder e influencia. Los aspavientos se los dejan para Mariano Rajoy y Carles Puigdemont, entre muchos otros actores de esta gran tragicomedia. Lo suyo es vender Mercedes y BMWs en todo el mundo, cosa que por cierto tampoco está al alcance de catalanes y españoles.

El final –para el que falta bastante– está escrito: habrá encaje de Cataluña en España y en Europa. ¿Es imposible entonces la independencia de Cataluña? No, imposible en política no hay nada. Pero sí es imposible dentro de la UE y de la eurozona

El final –para el que falta bastante– está escrito: habrá encaje de Cataluña en España y en Europa. ¿Es imposible entonces la independencia de Cataluña? No, imposible en política no hay nada. Pero sí es imposible dentro de la UE y de la eurozona. Sobre el papel, podría ser independiente una Cataluña que no quiera estar en Europa ni en el euro, pero esa Cataluña, que también existe, es muy, muy minoritaria.

Otra cosa es que tarde en haber acuerdo –puede que haya incluso algún que otro rebote– porque las partes están, aparentemente, muy distantes y precisan resituar a sus bases. Pero el vector resultante suena a pacto o, si se prefiere, no suena a independencia. No pasa nada, no pasará nada que no quiera Alemania que pase.

Mi exdirector Juan Ramón Díaz, un sagaz periodista ya fallecido, solía decir ante las situaciones de tensión: "No pasa nada. Nunca pasa nada, y si pasa, tampoco pasa nada". El maestro ya no está aquí para contarlo pero el eco de sus palabras resuena: No pasa nada. @J_L_Gomez

Comentarios