Corea del Norte asegura que Estados Unidos le ha declarado la guerra

Kim Jong-un, dictador norcoreano, y Donald Trump, presidente de EE UU. / RR SS
Kim Jong-un, dictador norcoreano, y Donald Trump, presidente de EE UU. / RR SS

El ministro de Exteriores norcoreano ha advertido que desde ahora Pyongyang se reservará el derecho derribar de bombarderos estadounidenses fuera de su espacio aéreo.

Corea del Norte asegura que Estados Unidos le ha declarado la guerra

Corea del Norte y Estados Unidos siguen tensando la cuerda. Nadie cede ante las amenazas. El conflicto es inminente. El combate verbal sin precedentes que han protagonizado Donald Trump y Kim Jong-un ha tocado un nuevo límite este lunes, luego de que el ministro de Exteriores norcoreano, Ri Yong-un, asegurara que Washington le ha declarado la guerra a Pyongyang, y, además, defendiera que el país asiático tiene el derecho de derribar bombarderos estadounidenses fuera de su espacio aéreo.

El diplomático norcoreano ha aprovechado su breve encuentro con los medios a la salida de su hotel en Nueva York para añadir pólvora a la escalada bélica que han prometido Trump y Jong-Un. “El mundo entero debería recordar claramente que fue EEUU el primero en declarar la guerra a nuestro país. Y desde que EEUU nos ha declarado la guerra tenemos derecho a tomar medidas como derribar a bombarderos estratégicos estadounidenses incluso si no están dentro de las fronteras aéreas de nuestro país”, declaró Yong-un.

La respuesta desde Washington no se hizo esperar. Unas horas más tarde la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, aprovechó una conferencia de prensa para contestar a las advertencias del ministro norcoreano: “No hemos declarado la guerra a Corea del Norte, y francamente, sugerir eso es absurdo”, sentenció Sanders, añadiendo más adelante que “nunca es apropiado que un país dispare contra las aeronaves de otro país cuando se encuentran sobre aguas internacionales”.

Asimismo, la portavoz de Trump ha insistido en que el objetivo de la administración norteamericana sigue siendo la desnuclearización de Corea del Norte, y no una guerra con esa nación. Por lo que ya han emprendido una serie de sanciones en contra del régimen de Kim Jong-Un, la cuales han tomado un nuevo revés este domingo, cuando el presidente de Estados Unidos incluyó a la nación asiática en la lista de países con prohibición para entrar a la frontera estadounidense.

La retórica bélica de Corea del Norte y Estados Unidos ha encendido las alarmas de los grandes líderes del mundo. Mientras desde Rusia se instaba a ambos territorios a dejar de decirse “estupideces”; Corea del Sur ha querido adoptar una postura más sensata, dejando claro que “es muy probable que Corea del Norte haga otras provocaciones”, por lo que “es imprescindible que nosotros, Corea y Estados Unidos, juntos, manejemos la situación”, con el fin de “evitar una mayor escalada de las tensiones o cualquier tipo de choques militares accidentales que pueden salirse rápidamente de control”, sentenció esta semana el ministro de Exteriores surcoreano, Kang Kyung-wha.

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