Las mil y una muertes: ¿será Occidente el Próximo Oriente?
El fundamentalismo musulmán, como el judío y el cristiano, deben ser combatidos por sus correligionarios ortodoxos o laicistas, propone este autor en un nuevo análisis.
El fundamentalismo musulmán, como el judío y el cristiano, deben ser combatidos por sus correligionarios ortodoxos o laicistas, propone este autor en un nuevo análisis.
El mismo día en que los yihadines hacían una matanza de turistas occidentales en el Túnez post Ben Ali, y procedían a decapitar al jefe de una empresa próxima a Lyon, un suicida tan “mártir” como Sansón, se llevaba con él a decenas de chiíes en Kuwait. Estos otros muertos, musulmanes, colmarían estadísticas cotidianas si fuesen franceses, británicos, alemanes, españoles…
Con arreglo a lo habitual el turismo nutricio de las tiranías comenzó a descender alarmantemente desde el mandato democrático, de “transición” del actual presidente tunecino, de 88 años.
El fundamentalismo musulmán, como el judío y el cristiano, deben ser combatidos por sus correligionarios ortodoxos o laicistas.
Las antiguas colonias de varias potencias europeas ya no lo son ni se justifican sus intervenciones anacrónicas.
Oriente, para los orientales.
Proscríbase las denominaciones ilusorias de “Califato” y, especialmente, de Estado Islámico.
Sólo hay un Alah y su profeta Mahomed.
