Donald Trump ha decidido cancelar el programa de protección para inmigrantes ilegales DACA y llevarse por delante a unos 800.000 soñadores, aun cuando el pueblo estadounidense se declara en contra de ello. Un reciente sondeo ha revelado que el 76% de la población norteamericana rechaza que se deporte a los “dreamers”.

La encuesta, desarrollada por la compañía Morning Consult, y divulgada por el periódico estadounidense Politico, expone que mientras solo el 15% de los ciudadanos consultados apoya la deportación de los extranjeros indocumentados, un abultado 58% quiere que los beneficiados por el programa de Obama se queden en Estados Unidos y puedan obtener la nacionalidad. Mientras otro 18% de los participantes se ha mostrado a favor de que los dreamers tan solo tengan la oportunidad de recibir la residencia.

El 66% de los votantes de Donald Trump se muestran en contra de la deportación de los “dreamers”.

Así mismo, uno de los datos más curiosos que ha dejado al relieve el nuevo análisis de la firma de encuestas es que los dreamers cuentan con el apoyo de los norteamericanos, independientemente de su ideología política. En ese sentido, los resultados arrojaron que el 84% de los que se oponen a la deportación son demócratas, el 69% republicanos y el 74% de independientes.

Este sondeo de Morning Consult fue realizado entre el 31 de agosto y el 1 de septiembre, y sus conclusiones están basadas en el recuento de las encuestas realizadas a unos 1.993 votantes registrados. El margen de error es del 2%.

La decisión de Donald Trump de cancelar el programa DACA ha sido fuertemente criticada por Obama, por el pueblo, por los grandes líderes tecnológicos e incluso por algunos legisladores republicanos. Mientras tanto, el magnate neoyorquino ha prometido que “revisará” la situación de los jóvenes indocumentados si el Congreso no encuentra una solución para ellos en el plazo de seis meses que estableció este martes, tras anunciar el final de la medida de protección. “Como he dicho antes, resolveremos el tema de DACA con corazón y compasión, pero a través del proceso democrático legal”, insistió el mandatario estadounidense por medio de un comunicado.