Los negocios turísticos utilizan la publicidad sexista para promocionarse
El cartel de Los Adrià que causó revuelo por mostrar a cuatro mujeres con su trasero al aire para promocionar una fiesta en Ibiza es solo una pequeña parte de un gran negocio de marketing que muchos utilizan.
Durante el verano muchos negocios del mundo utilizan la imagen de las mujeres sexualizadas para poder sacar algo de provecho y poder promocionarse. Los Adrià fue el último salpicado por la polémica al promocionar una fiesta en Ibiza con un cartel en el que mostraban a cuatro mujeres con el trasero al aire. Lo peor del caso, es que gracias a esas publicidades y la imagen poco seria que dan los negocios, miles de turistas se aprovechan y acosan sexualmente a las mujeres.
¿De verdad pensáis @ferranadria @HeartIbiza y @Cirque que este anuncio es digno del local y toda vuestra trayectoria? #PublicidadMachista pic.twitter.com/T4IFwhSP6B
— Aitor Morrás (@AitorMorras) 17 de julio de 2017
Actualmente, no existen números negativos contra el turismo en España. No hay nada exaltante que evalúe las agresiones sexuales durante el verano y en cada zona en donde siempre son reportados acosos o abusos. Pero lo que sí se sabe a leguas, es que en España se denuncian aproximadamente más de mil violaciones por año.
Según datos de Europapress.es, durante el 2014 se registraron 1.239 agresiones sexuales y para el siguiente año se registró una cifra similar con 1.127 agresiones. Lo que se desconoce y muchos sospechan, es que durante el verano, estás cifras se disparan por culpa del alcohol, las drogas, el relajo y los puntos de turismo desenfrenado en donde miles se reúnen.
Para evitar que grandes fiestas nacionales se vean manchadas por el acoso sexual, muchos ayuntamientos han tomado medidas para educar a la población y evitar dañar el patrimonio cultural de la nación. De igual forma, la ONG Asociación Bienestar y Desarrollo (ABD), presentó un vídeo publicitario con el hashtag #NoJodasLaFiesta, para poder sensibilizar a la población y evitar a los agresores sexuales.
Muchos de los agresores suelen atribuir parte de la culpa a la mujer. Pero ellos ignoran que una mujer puede estarse divirtiendo sin que eso sea una invitación para que él la manosee. Asimismo, muchas mujeres hacen un llamado para intentar luchar contra los estigmas sociales y no incitar nunca nada, porque lo que puede empezar como un juego, puede terminar en una violación.
