Miami hace cábalas con los negocios en Cuba y un constructor ya piensa en dos casinos

Probablemente, las regulaciones relacionadas con los cambios de política tardarán meses en llegar, y todavía están en vigor sanciones económicas contra Cuba implementadas por el Congreso.

Mientras el gobierno de Estados Unidos estudia cómo normalizar las relaciones con Cuba, sobre todo en el estado de Florida, donde residen muchos cubanos, se piensa en las oportunidades económicas que van a abrirse, pasado un tiempo. Banca, envíos, comercio, telecomunicaciones y viajes están en el punto de mira. El diario el Nuevo Herald de Miami publica un análisis al respecto.

"Las implicaciones inmediatas no van más allá de observar con esperanza un ambiente que acabará convirtiéndose en una transición democrática", dijo Adolfo Henriques, presidente y ejecutivo principal de Gibraltar Private Bank & Trust, con sede en Coral Gables. "Va a tomar algún tiempo antes de que los verdaderos requisitos, oportunidades, etc. se materialicen. No es algo que pueda pasar de un día para otro", precisa Henriques.

El anuncio de Obama no mejorará por sí solo unas relaciones económicas rotas hace 54 años. Probablemente, las regulaciones relacionadas con los cambios de política tardarán meses en llegar, y todavía están en vigor sanciones económicas contra Cuba implementadas por el Congreso, ahora con mayoría republicana, lo que puede dificultar algunos planes del presidente demócrata Barack Obama.

Según Barry E. Johnson, presidente y ejecutivo principal de la Cámara de Comercio del Gran Miami, "es prematuro comentar sobre los efectos de este anuncio" de Obama y Raúl Castro. "Como en todas las proclamaciones significativas y monumentales, los detalles son lo vital", indica Johnson.

El Nuevo Herald también informa de que, según un alto funcionario de la administración federal, la exportación de bienes necesarios a los llamados cuentapropistas — empleados por cuenta propia — de Cuba será permitida, así como la de suministros agrícolas para granjeros particulares a pequeña escala y materiales de construcción destinados al pueblo cubano. También se espera que las telecomunicaciones y la penetración de la Internet se expandan, creando oportunidades para las compañías tecnológicas estadounidenses.

Entre las empresas que podrían beneficiarse ya a corto plazo estarían: Copa Holdings, una aerolínea panameña; Coca Cola Femsa, una embotelladora; Seaboard Corp., firma de envíos, comida y electricidad, y MasTec, compañía cotizada en bolsa de Miami que se dedica a la ingeniería y construcción de infraestructuras tales como transmisiones eléctricas, oleoductos y gasoductos, energía renovable y redes inalámbricas.