¿Logrará el nuevo ataque a las pensiones acallar las voces que se oponen?

Si la población fuese consultada en referéndum, algo que la ley no impide, el mantenimiento del poder adquisitivo de las pensiones ganaría por abrumadora mayoría porque para muchos españoles la trinidad es sagrada, y cito, sanidad, enseñanza y sistema de pensiones. El resto del presupuesto que se reparta como crean los expertos pero la gente indefensa, la que carece de capacidad de sobreponerse a los ataques por sus propios medios, hay que protegerla, y me refiero de nuevo a los niños, los enfermos y los jubilados. ¿Que pretenden que haga una persona de 80 años, por ejemplo, cuando su pensión congelada ya no le permite pagar los recibos de la electricidad, el agua, el gas o el alquiler, y debe abandonar su casa, o la Residencia de Ancianos en otros casos?, porque las residencias o asilos públicos carecen de plazas y costarían más. ¿Quizás juntarlos debajo de un puente acondicionado? ¿quizás se los traspasamos a los hijos parados o los nietos mileuristas?

Al Gobierno ya se le ocurrió una solución ocurrente, subir las pensiones un 0,25% hasta el año 2022, es decir, tres euros, no sabemos si para donarlos a los sin techo, o para comprar las velas de cumpleaños y festejar haber sobrevivido un año más. De momento ya ha surgido un colectivo que pretenden blindar el poder adquisitivo de las pensiones, que pasarían a ser intocables. Se llama MERP y de momento han conseguido la adhesión de 50 ayuntamientos y 205 organizaciones que representan a 12,7 millones de ciudadanos. Han recogido cerca de un millón de firmas pero que cuando esto se divulgue llegarán a varios millones y será imparable porque cada vez menos gente se deja engañar por los que dicen representarnos.

Para entender bien como se llega a la conclusión de que el Sistema de Pensiones es insostenible, podremos un claro ejemplo. Imagine que somos el Estado y recibimos unos ingresos repartiendo la cantidad recibida entre los dos bolsillos del pantalón. En uno colocamos lo destinado a Seguridad (Social) y en el otro lo destinado al resto de gastos. Si consideramos que nuestros bolsillos son independientes podría suceder que el destinado a los Presupuestos Generales no alcance a cubrir sus gastos y tenga déficit mientras en otro tenga superávit. Entonces el bolsillo deficitario pide crédito y emite deuda que es cubierta por el superávit del otro bolsillo con pago de intereses. A primera vista parece algo estúpido pero es como ocurrió. Luego el bolsillo de la Seguridad (Social) empieza a tener déficit y es el otro bolsillo el que le presta fondos a un interés del 1%. Si el bolsillo de los Presupuestos Generales tiene déficit surge una deuda que crecerá hasta donde sea necesario (actualmente más del 100%), pero si el bolsillo de la Seguridad (Social) tiene déficit se dice que está en quiebra y es insostenible ¿pero como puede estar en quiebra un bolsillo? En quiebra solo podemos estar nosotros (el Estado). Los bolsillos no pueden ser cajas cerradas. El Estado ha de ser una sola Caja que reparte los ingresos para cubrir las necesidades de los ciudadanos según su importancia. No tiene sentido que el sistema de pensiones pague aquellas que no han sido contributivas, por las de viudedad, alguna de las cuales duran 50 años por estos matrimonios que tiene gran diferencia de edad. Esto no sucede en otros países mas desarrollados.

Se reunirá el Pacto de Toledo y alumbrarán soluciones descabelladas como subir más y más la edad de jubilación cuando el mercado pedía hace tiempo una reducción de jornada como había hecho Francia, congelar las pensiones o incluso bajarlas. Habrá que idear fórmulas nuevas pero para los que están cotizando ahora para que algún día puedan tener pensiones medias como otros países (Australia 3.434€, Holanda 3.564), Dinamarca 4.293, Alemania 3.325). En todas parte hay planes privados, como la mochila austriaca que propone Ciudadanos, pero ninguna de esas medidas puede ser aplicada a gente mayor que no puede dar marcha atrás y necesita subsistir. Las soluciones justas son las más difíciles pero las más deseadas e incluyen terminar con el desmesurado fraude en las pensiones de invalidez temporal que se han disparado, o en terminar con la economía sumergida, y en terminar con las Cajas Cerradas pasando parte del presupuesto de las pensiones a los Presupuestos Generales, o subiendo los tipos donde se pueda, y ya puestos, eliminar gastos superfluos como ha hecho Macron en Francia reducíendo los cargos políticos en un tercio. Si lo que el Estado pretende es cargar a nuestros mayores al esfuerzo familiar al estilo de los países en vía de desarrollo, estoy seguro que fracasará.