El aceite de argán acelera la economía marroquí

Argán.
Argán.

Parte de los beneficios de consumir el aceite de argán son el poder reducir la hipertensión, el colesterol malo, dolores articulares, reumáticos y estimular la capacidad cerebral.

El aceite de argán acelera la economía marroquí

Si se dijera que una sesión de masajes con aceite de argán puede costar 200 euros o que ocupar un litro en la cocina puede llegar a 150 euros parecería exageración, sin embargo, el sabor intenso, aroma suave y color dorado han hecho de este aceite uno de los más valorados del mundo. Si el aceite de oliva es reconocido, el de argán consigue muchos más fanáticos en el mundo debido a sus propiedades y extraordinaria concentración de Vitamina E, Omega 3, 6 y 9.

El aceite de argán no sólo cuenta entre sus propiedades con los componentes mencionados anteriormente, sino también con ácidos linoléico, alfalinoléico, oleico y araquidónico, siendo muy recomendado para quienes tienen problemas cardiovasculares y se interesan por la regeneración celular (retardar el envejecimiento). Parte de los beneficios de consumir el aceite de argán son el poder reducir la hipertensión, el colesterol malo, dolores articulares, reumáticos y estimular la capacidad cerebral, entre otras cosas.

El aceite de argán u oro líquido como muchos le conocen, se ha ganado bien su nombre al representar un elemento irremplazable en Marruecos, específicamente en las zonas de Tiznit y Esauria. Entre los bereberes el argán es conocido como “el dador de vida”, cuestión que paradójicamente para Marruecos ha resultado ser igual de importante al impulsar la economía en los últimos años. Así, la Unión Europea al estar consciente de las propiedades de este producto y la importancia que tiene, ha financiado la plantación de 40.000 árboles que ya en un tiempo estarán dando frutos que pasarán a convertirse en el preciado aceite.

Dentro de los estudios que se han hecho de este fantástico aceite se ha comprobado que su efecto mayormente es hidratante y de reestructuración celular, por lo que es un aliado magnífico cuando se tiene que luchar contra los radicales libres (responsables del envejecimiento). Algunos de los efectos del consumo de aceite de argán son el tener una piel más resistente, fuerte y brillante, además de atenuar las arrugas y flexibilizar la dermis.

Se recomienda el uso de este producto a quienes sufran de psoriasis, quemaduras, acné y estrías. En la actualidad es posible encontrar productos cosméticos fabricados en base a aceite de argán, aunque a un precio más elevado que el de otros productos.

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