Una Villa Olímpica en estado lamentable recibirá a los atletas para los JJ OO
Fallas como baños tapados, tuberías con fugas o cables expuestos, son algunas de las características de la Villa Olímpica que recibirá a los atletas que comenzarán a llegar a Río.
Ello fue suficiente para que la delegación olímpica de Australia por ejemplo, se negara rotundamente a instalarse en la Villa Olímpica. La Villa, cuya infraestructura comprende 31 torres de 17 pisos, ha abierto sus puertas desde el domingo, a tan sólo menos de dos semanas antes del comienzo de los Juegos Olímpicos de Río, que darán inicio el 5 de agosto. El complejo albergará a más de 17.000 atletas y sus entrenadores durante los juegos.
"Sentimos que el edificio no era seguro, debido a una combinación de problemas eléctricos y de plomería", dijo la jefa de la misión australiana, Kitty Chiller, quien agregó que dentro de la misión se llevó a cabo una prueba de estrés, en la que abrieron tapas y grifos, encendieron luces de manera simultanea y abrieron ventanas, para luego descubrir "fugas significativas". "Nunca había experimentado, estos son mis quintos Olímpicos, una villa en este estado de falta de preparación en este punto y tiempo", concluyó Chiller. "Algunos se sienten cómodos con permitir que sus equipos se muden y los envidiamos. Estamos razonablemente confiados en que vamos a poder entrar a la villa el miércoles", agregó Chiller. La delegación australiana ha afirmado que los atletas se hospedarán en hoteles hasta que los problemas hayan sido resueltos.
El Comité Olímpico de Brasil ha admitido que la villa cuenta con algunos inconvenientes, pero asegura que serán abordados en los próximos días."Cada villa olímpica, debido a su magnitud, necesita algunos ajustes antes de que esté perfecta. Lo importante es que todo será resuelto antes de los juegos, sin que esto moleste a los atletas", afirmó Carlos Arthur Nuzman, presidente del comité organizador de Río 2016. El alcalde de Río de Janeiro mantuvo una postura distinta al restarle gravedad a la situación del los edificios."Queremos que se sientan aquí como si estuvieran en casa. Siento que les podría poner un canguro saltando enfrente del edificio", afirmó Eduardo Paes, alcalde de Río.
Mike Tancred, vocero del comité australiano, hizo alusión a las declaraciones del alcalde y dijo que, "No necesitamos canguros, necesitamos plomeros para que resuelvan los problemas encontrados en los apartamentos". La Asociación Olímpica Británica reconoció que aunque hay algunas "dificultades de mantenimiento" con la villa, el primer equipo del Reino Unido tiene previsto instalarse el martes. Son numerosas las preocupaciones de seguridad han surgido antes del inicio de los juegos, incluyendo la amenaza del terrorismo internacional, y los altos niveles de crimen que se contabilizan en la ciudad sede.
Un atleta extranjero que vive en Río presuntamente tuvo un encuentro con criminales el domingo. Se trata de Jason Lee, un atleta de jiu jutsu de Nueva Zelanda, quien escribió en Facebook que fue "secuestrado" por un grupo de hombres armados en uniformes de la policía militar, y que luego fue forzado a retirar dinero de dos cajeros automáticos. "Fui amenazado con un arresto si no me subía a su auto privado y los acompañaba a dos cajeros automáticos a retirar una larga suma de dinero para un soborno", escribió Lee en su cuenta de Facebook. El jiu jutsu no es un deporte olímpico, razón por la que Lee no se encuentra en el país para competir en los juegos, pero la situación que vivió el ex campeón nacional de jiu jutsu, sí que preocupa a los atletas, y es por ello que el Comité Olímpico local deberá tomar las medidas pertinentes para garantizar la seguridad de los atletas tanto dentro como fuera de la Villa Olímpica.
