Florentino Pérez y Cristiano Ronaldo convierten al Real Madrid en un geriátrico

El presidente del Real Madrid sigue dejando para más adelante el cumplimiento de su promesa de “españolizar y rejuvenecer” el equipo, y así tras las renovaciones de Kroos, Modric y Bale – todos ellos nacidos para jugar en el Madrid – llega ahora la de Cristiano Ronaldo hasta 2021, el buque-insignia de un madridismo que sigue necesitando a un ídolo producto del marketing al que agarrarse para combatir la superioridad insultante del Barça de Messi.

En esa fecha el delantero portugués contará con 36 años, por lo que el ofrecimiento que le hecho el presidente se parece más a un plan de pensiones o de jubilación, ya que no se descarta que, además de un pastizal, su nuevo contrato incluya muletas, un andador y algún remedio para la disfunción eréctil.

Curiosamente esta renovación está siendo más celebrada por sus rivales que por los propios madridistas, que están asistiendo a la triste temporada que está protagonizando la vedette de Madeira. Es más, ahora mismo sus propios compañeros buscan más a Bale, conscientes de que el presente y el futuro del Real Madrid pasa más por la botas del galés que por los gestitos del portugués quien, a falta de goles de penalti o de empujar, está confirmando que es un buen futbolista sin más.

Pero lo que parece claro es que Cristiano Ronaldo no llegará a cumplir este contrato y que estamos ante una jugada financiera de Florentino Pérez, quien pretende frenar la devaluación de su estrella con este acto de propaganda, preparando una venta multimillonaria en el mercado asiático en un plazo máximo de dos temporadas.

Lo que es indudable es que tanto Cristiano Ronaldo como su representante Jorge Mendes siempre que vayan al cajero a pedir el saldo de sus cuentas corrientes se acordarán de quien les ha llenado los bolsillos a manos llenas y seguro que gritarán con todas sus fuerzas “¡Siuuuuuuuu!”. @Bajarlaalpasto