Un sindicato suizo planta cara a Inditex y acusa a Zara de dumping salarial

Entrada a la sede central de Inditex, la matriz de Zara, en Arteixo (A Coruña).
Entrada a la sede central de Inditex, la matriz de Zara, en Arteixo (A Coruña).

El sindicato Unia, que acusa a la marca española de dumping salarial, llegó a bloquear una obra que promueve la marca Zara en Zúrich. La prensa local arremete contra Inditex.

Un sindicato suizo planta cara a Inditex y acusa a Zara de dumping salarial

El sindicato Unia, que acusa a la marca española de dumping salarial, llegó a bloquear una obra que promueve la marca Zara en Zúrich. La prensa local arremete contra Inditex, cuyos abogados niegan las denuncias.

ESuiza no hay salario mínimo, pero sí convenios sectoriales de vigilancia estricta por los sindicatos. En el de la construcción, al cambio, no se baja de los 4.000 euros brutos, si bien de ese dinero hay que descontar varios gastos importantes, entre ellos el de la Seguridad Social. Pero la norma no siempre se cumple. Así, la prensa local suiza se hizo eco de un caso de rebaja salarial que afecta a Zara, de Inditex, como firma promotora de una nueva tienda en BahnhofstrasseEl caso de esta contrata de Zara podría no ser el único, de ahí la inquietud sindical en Suiza.

Desde Zúrich dio la voz de alarma a MUNDIARIO Xosé Abelenda, de Santa Comba, que trabaja en la Unia de Biel en asuntos de emigración, construcción, yeso y hostelería. Los trabajadores llegaron a parar una obra promovida por Zara en Bahnhofstrasse (Zúrich), en la que están contratados obreros gallegos de Bergantiños, Xallas y Rías Baixas, así como de Andalucía, quienes no cobran lo que marca el convenio, sino mucho menos en varios casos. Según fuentes sindicales, en vez de 4.000 euros, algunos percibieron entre 900 y 2.000 euros.

El sindicato Unia, al que la prensa local suiza ha dado voz, exige que se respeten los convenios de Suiza, con salarios y horarios suizos y no españoles, y califica de "grave" el dumping salarial de Zara, que, según los sindicalistas, podría haber obligado a algunos trabajadores a jornadas de diez horas en vez de ocho, con salarios por debajo de lo estipulado en Suiza. Abogados de Inditex negaron las denuncias de manera categórica, pero lo cierto es que no pudieron evitar que los sindicalistas suizos parasen las obras de Zara.

Inditex suele trabajar con proveedores gallegos, algunos de los cuales han adquirido un gran desarrollo internacional gracias a los contratos que les brinda el grupo de Amancio Ortega. Al menos en otras ciudades, como Nueva York, Inditex cumplió las normas locales en materia salarial y laboral. Este caso de Suiza supone un revés para la buena imagen de Zara y podría dar lugar a la adopción de medidas que eviten situaciones así en el futuro.

Las denuncias en el exterior contra Inditex se habían centrado hasta ahora en las precarias condiciones laborales de algunos de sus proveedores de ropa, pero no tanto en las obras de sus tiendas, caracterizadas en general por su alto nivel arquitectónico.

Comentarios