En el Reino de Marruecos hay cada vez más conversos al cristianismo

Imágenes del cristianismo. / Mundiario
Imágenes del cristianismo. / Mundiario

Un hombre de 30 años llamado José explica que "la televisión e Internet son dos maneras muy eficaces para el proselitismo. Un soldado se convirtió al cristianismo en mi Iglesia con la cadena Al-Hayat ". 

En el Reino de Marruecos hay cada vez más conversos al cristianismo

Un hombre de 30 años llamado José explica que "la televisión e Internet son dos maneras muy eficaces para el proselitismo. Un soldado se convirtió al cristianismo en mi Iglesia con la cadena Al-Hayat ". 

Aunque tienen nombres musulmanes como Mohammed o Ali,  estos marroquíes son cristianos y siguen asistiendo a la santa misa, a pesar de la ira de los islamistas y las persecuciones de la policía.

Según Abd-al-Halim, el coordinador de la Iglesia Anglicana de Marruecos, "un millar de nosotros pertenece a cincuenta iglesias independientes en las principales ciudades del Reino”, añade el médico de 57 años que se convirtió al cristianismo hace 16 años, mientras vivía en el extranjero.

Practicar a escondidas

"Hacemos nuestras prácticas religiosas en secreto. Sin embargo, por motivos de seguridad, nos vemos obligados a trabajar como una organización secreta. Cuando una iglesia individual llega a ser demasiado grande (más de 20 miembros), debe ser dividida en dos entidades para no despertar sospechas”, advierte Abd-al-Halim que regresó a su país Marruecos hace siete años y fue sorprendido por el aumento de los convertidos al Cristianismo. "En los años 70, dice, había 400 miembro y ahora somos más de un millar."

Conversión a través de la televisión o Internet

La mayoría de estos conversos son de clase media, trabajan en el sector privado o son ingenieros. Sin embargo, también hay artistas, amas de casa, estudiantes y jóvenes desempleados. El cristianismo se ha extendido ,últimamente, en Marruecos. La Iglesia protestante por su parte comenzó a afianzarse en los años 90, cuando los misioneros extranjeros llegaron a Marruecos. Hoy en día, hay siete iglesias libres en Marrakech, seis en Casablanca, Rabat y cinco en El Aaiún.

Un hombre de 30 años llamado José explica que "la televisión e Internet son dos maneras muy eficaces para el proselitismo. Un soldado se convirtió al Cristianismo en mi Iglesia con la cadena Al-Hayat ". Un hombre de negocios, se convirtió al Cristianismo hace 19 años con su familia, dijo: "Muchos de nosotros consideramos el Islam como una religión restrictiva y no como una verdadera doctrina. Por otro lado, vemos el Cristianismo como una religión de tolerancia y amor". Agregó que el 60% de ellos abrazan el cristianismo como resultado de los contactos personales, el 30% a través de la televisión e Internet y un 10% por los misioneros. Los tres canales de televisión cristianos que emiten en Marruecos, en el dialecto local, la música religiosa y sermones son Al-Hayat Al-Mu'jizah y Sat 7.

Penas de prisión para los conversos

Para no llamar la atención y reacciones hostiles, reuniones de la iglesia se celebran en apartamentos o casas en los barrios de la clase media. "Debemos usar la discreción porque la mayoría de la gente no puede admitir la posibilidad de que seamos  árabes y no musulmanes. El mayor peligro para nosotros es la ignorancia”, dice Abd-al-Halim. Del mismo modo, se ven amenazados por el artículo 220 del Código Penal marroquí, que establece una pena de seis meses a tres años de prisión por  “cualquier persona que incita a socavar la fe de un musulmán o convertir a otra religión". Joseph señala que ya se ha convocado por la policía decenas de veces. A pesar de ello, reconoce que el Reino es "el más liberal de todos los países árabes y creo que el rey realmente quiere la democracia."

Por su parte, Bin Shakrun Radwan, presidente de los teólogos en Casablanca, expresó su extrema oposición a estos nuevos cristianos y explicó que "la apostasía es el más grave de los pecados que se pueden cometer por un musulmán”. En cuanto a los islamistas, que ven esto como algo totalmente “inaceptable”, encontramos Hussein Daoudi, miembro del Partido de la Justicia y el Desarrollo islamista (PJD) que dice "Nuestros partidarios no aceptan el hecho de convertirse al Cristianismo” y se opuso a la misma. Por tanto, no lo ve como un problema  "Siempre y cuando se mantenga en un nivel personal. Los problemas surgen, según él,  cuando los niños o los maestros llegan a la escuela con una cruz. “Es claro que esto no se puede tolerar".

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